Interpol Argentina informó a la oficina en Washington que el ex espía Antonio Jaime Stiuso estaba en Estados Unidos y aportó una serie de datos y direcciones para su localización. Interpol Brasilia confirmó días atrás, con datos concretos, que el ex integrante de la oficina de Inteligencia había dejado Brasil desde Porto Alegre con destino Miami el 19 de febrero de este año, apenas un mes después de la muerte aún no esclarecida del fiscal de la causa AMIA, Alberto Nisman.
La novedad, confirmada tanto por fuentes del Gobierno argentino como de los Estados Unidos, es que Interpol Washington respondió a la oficina en nuestro país que efectivamente está registrada la llegada de Stiuso, pero que para que se brinde más información, el requerimiento debe ser enviado por "los canales de asistencia judicial mutua". Según un alto funcionario de Seguridad de la Nación, esa respuesta "dilata el proceso" ya que los canales de cooperación previstos exigen "la intervención de un juez estadounidense".
Con fecha 30 de septiembre Argentina emitió un alerta azul con una serie de direcciones en Miami para que Stiuso fuera localizado invocando "la Cooperación Policial Internacional, y el Estatuto y Reglamento de Interpol". Brasilia ya había informado que el ex espía había dejado el vecino país con pasaporte italiano a lo que Washington pidió que se realizara "un pedido formal de asistencia legal de conformidad con el tratado sobre la materia que vincula a los dos países". Argentina insiste en afirmar que tal requerimiento está cumplimentado.
Interpol había subido la ficha de Stiuso al sistema de notificación que comunica a las policías de los 190 países miembros con una fotografía tomada en el año 2013 y la solicitud de localización "urgente" como testigo en la causa AMIA, sobre cuya participación o rol en la investigación el Gobierno argentino quiere que explique.
En la tesis de la Casa Rosada, la investigación por la muerte del fiscal Nisman debería avanzar sobre el ex espía que trabajó desde antes y durante el gobierno de los Kirchner. También la investigación de la causa por el atentado ocurrido en el año 1994 y cuyo juicio por encubrimiento se encuentra en pleno desarrollo debería, para el Gobierno, tenerlo por lo menos como testigo. En cambio la jueza Fabiana Palmaggini y la fiscal Viviana Fein, que investigan la muerte de Nisman, no estarían citando a Stiuso a declarar, aunque sí manejan la hipótesis de un suicidio inducido y ponen el foco sobre otros miembros de la Inteligencia y del Ejército, por los intensos cruces de llamados el fin de semana del 17 y 18 de enero.
La Presidenta sin embargo apuntó desde el primer momento a Stiuso y reafirmó sus sospechas al responsabilizar directamente a los Estados Unidos de brindar protección al ex espía, desplazado de la oficina poco antes de la muerte de Nisman. Cristina Fernández de Kirchner pronunció uno de sus discursos más duros, el último como Presidenta ante la ONU, a fines del mes pasado. Dijo que Stiuso está "casi protegido" y también: "Si nosotros somos cómplices del régimen iraní. ¿qué es Barack Obama entonces? No se puede seguir con esta hipocresía" en referencia al acuerdo nuclear entre Estados Unidos e Irán y el Memorandum entre Argentina y Teherán.
Desde Washington, en una entrevista con C5N, Cristina había advertido además que Stiuso "fue la persona que intervino desde el primer momento del atentado en 1994. Él manejaba al fiscal y es el que lo proveía de toda la información, aparentemente, a través de servicios extranjeros".