La cámara alta trata en estos días la aprobación de un polémico acuerdo entre la Argentina y China para la instalación de una estación espacial de exploración lunar en el paraje Bajada del Agrio, en Neuquén, a 1.380 kilómetros de Buenos Aires. “Estamos frente a una brutal cesión de soberanía”, alerto al respecto el ex titular de la SIDE Miguel Angel Toma.
Mientras el Congreso debate el tema, excavadoras y cientos de obreros trabajan rápidamente en la construcción de esa planta que forma parte de uno de los más acariciados sueños de Pekín en territorio argentino, publicó hoy La Nación.
Según el matutino, la decisión de la presidenta Cristina Kirchner y su par chino, Xi Jinping, de avanzar con la estación espacial por encima de cualquier aval parlamentario no es el único dato llamativo del proyecto. Los ‘anexos reservados‘ que contienen la letra chica para el desarrollo final de la estación espacial que se firmaron con la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (Conae) están bajo siete llaves y empiezan a despertar sospechas. En medio de ese hermetismo, sólo se dio a conocer una parte del texto del acuerdo marco para su aprobación en el Congreso.
“Cuando este tema empezó a coversarse y a concretarse con la visita del primer ministro chino, preocupó a muchos analistas del tema y a dirigentes políticos”, señaló Toma en diálogo con radio Mitre.
Toma aseguró que la famosa entidad china supuestamente vinculada al seguimiento de la actividad aeroespacial china es también un organismo vinculado al departamento general de armamento del ejército chino. “Es una estructura que puede hacer el seguimiento de una misión especial, como por ejemplo el seguimiento en el caso de una confrontación de los misiles que puedan utilizarse con finalidad militar”, detalló.
En ese contexto, Toma advirtió que “estamos frente a una brutal cesión de soberanía” que cambia el contexto de América del sur considerada zona de paz.
“Esta instalación de esta base coloca un ruido muy fuerte y un riesgo de que deje de ser zona de paz”, insistió.
Toma consideró que “cuando la impericia de este Gobierno, que ha llevado al extremo las reservas en divisas que hoy constituyen un gravísimo problema para la economía, aparece una sesión de soberanía para que con cuenta gotas el gobierno chino empiece a dar los swap para convertir los u$s 11.000 mil millones del crédito firmado entre el Gobierno y China, pase a formare parte de las reservas".
“Esta es la más clara expresión del doble discurso kirchnerista, que en este caso tiene un componente gravísimo que es que nos coloca en centro de un potencial conflicto bélico a futuro, como puede representar a presencia dual cívico, militar y científico militar de china nada más y nada menos que en la Patagonia argentina", cuestionó.