En medio de un fuerte operativo de seguridad de la Gendarmería desplegado desde ayer en Rosario para atenuar el impacto de los ataques recientes de grupos narcos, el Gobierno analiza ahora adecuar la normativa de Defensa vigente para que las Fuerzas Armadas puedan actuar de manera directa en la lucha contra lo que el presidente Javier Mileidenomina un avance del "narcoterrorismo" en la Argentina.
Bajo la orden estricta del Presidente, tanto el ministro de Defensa, Luis Petri, como la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, evalúan cómo modificar la reglamentación de las leyes de Defensa y la de Seguridad Interior para que se pueda accionar sobre "organizaciones narcoterroristas con sustento externo".
Así, los militares no sólo podrían ejecutar un apoyo logístico a las fuerzas de seguridad federales como hicieron ahora en Rosario, sino que tendrían capacidad de acción en el terreno copado por grupos de narcos.
Modificación legal
Según confiaron a El Cronista fuentes calificadas de la Casa Rosada con acceso al despacho presidencial, la intención del Gobierno es modificar el decreto de reglamentación del Título I de la ley de Defensa que en sus primeros artículos contempla hasta ahora que "las Fuerzas Armadas serán empleadas ante agresiones de origen externo perpetradas por fuerzas armadas pertenecientes a otros/s Estados/s".
En la misma normativa se detalla que "se entenderá como agresión de origen externo el uso de fuerza armada por un Estado contra la soberanía, la integridad territorial o la independencia política de nuestro país". Esta fue la normativa que aplicó el kirchnerismo durante la última gestión de Alberto Fernández.
En el Gobierno de Milei evalúan que, si un grupo "narcoterrorista" tiene financiamiento externo para operar en la Argentina, se podría adaptar la normativa y evaluar un escenario de "agresión externa de una organización". En este caso, estaría justificado el accionar de intervención militar. Esto es lo que están analizando en estas horas en el Ministerio de Defensa y en Seguridad.
En la práctica esto implicaría mayor presencia y accionar de las Fuerzas Armadas en el terreno donde avanzan los narcos. Es decir, no se limitaría el accionar de los militares al apoyo logístico de las fuerzas de seguridad.
En paralelo a esto, Bullrich y Petri evalúan una modificación a la ley de Seguridad Interior para ampliar la cantidad de medios de apoyo de las Fuerzas Armadas en la lucha contra los narcotraficantes. Esto sería el uso de tropas militares con apoyo logístico para las fuerzas de seguridad.
Al parecer, el ministro de Defensa dialogó sobre estos temas con los altos mandos de las Fuerzas Armadas y contaría con aval de estos para un accionar más profundo de los militares en aquellas zonas como Rosario que están tomadas por grupos narcos.
Ley antimafia y cautela en las FF.AA
No obstante, fuentes castrenses dijeron a El Cronista que en el Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas que lidera el brigadier general Xavier Isaac observan con cierta cautela la decisión política de Milei de darle mayor protagonismo a los militares en el accionar represivo de los grupos "narcoterroristas".
En rigor, en las Fuerzas Armadas creen que para esto se debe contar con un sustento legal "firme y consensuado" por gran parte de las fuerzas políticas, con una planificación prevista, una cadena de mando reducida al máximo posible y un trabajo previo de inteligencia militar.
Este último punto es altamente cuestionable porque la ley de Seguridad Interior impide taxativamente la incursión militar en inteligencia que afecte a la seguridad interna, sobre todo con los antecedentes de la dictadura.
"Dentro de la ley todo, fuera de la ley nada", replica Isaac cuando lo consultan sobre el tema para dar la mirada del Estado Mayor Conjunto.
Como complemento de todo esta estrategia política de lucha contra los narcos y en paralelo al operativo de apoyo logístico de los militares que ayer se empezó a desplegar en Rosario, la ministra Bullrich avanza con la idea de enviar al Congreso un proyecto de ley antimafia o antibanda, que tipifica una nueva modalidad de persecución penal sobre el crimen organizado tomando los crímenes de estas bandas y adjudicándo a todos sus integrantes la responsabilidad del delito.
Es decir, que la idea es tomar parte de la jurisprudencia de Italia que define a los delitos de un integrante de un grupo narco como parte de un delito pleno y no aislado. Así, se se buscará establecer una nueva modalidad de persecución penal sobre el crimen organizado, tal como en el Código antimafia de Italia o la ley Rico de Estados Unidos, donde cada integrante de una organización lleva la pena de la organización por participar.
"Hay que modernizar la ley argentina para atacar de lleno a los grupos narcoterroristas en sus dimensiones de financiamiento económico y de actuación en el terreno", explicó Bullrich a El Cronista al evaluar los alcances posibles que tendrá este proyecto de ley.