Plataformas de streaming como Magis TV y Flujo TV han mostrado un crecimiento sorprendente, ya que brindan contenido premium, así como cine y series recientes, sin exigir el pago de una suscripción.
No obstante, es necesario subrayar que la legalidad de estas plataformas ha sido rechazada en varios países de Latinoamérica. Ahora, una alternativa gana popularidad para ver películas y series aunque su situación legal igualmente genera dudas.
No es Magis TV: qué es VK, la red social con streaming
VK, anteriormente conocido como VKontakte, es una red social rusa creada en 2006 por Pável Dúrov. Se ha consolidado como la plataforma más popular de Rusia y de varios países de Europa del Este, con más de 70 millones de usuarios activos mensuales.
Además de las funciones básicas de una red social, VK incluye funciones extra como audio y videos en directo, foros de debate y herramientas para coordinar eventos. Su alcance internacional permite que cualquier persona acceda desde la web o aplicaciones móviles.
Polémica por la disponibilidad de contenido sin licencia en VK
A lo largo del tiempo, VK fue señalada por permitir contenido no autorizado, sobre todo música y películas compartidas por los propios usuarios. Estas prácticas desencadenaron choques con empresas de entretenimiento y provocaron bloqueos en países que acusan a la plataforma de facilitar la piratería digital.
La situación también reavivó debates sobre la privacidad y el control estatal en Rusia. Aunque VK implementó medidas para moderar el contenido y cerrar acuerdos con algunos titulares de derechos, sigue afrontando cuestionamientos sobre la efectividad de sus filtros y su responsabilidad frente a la distribución de material protegido.
Riesgos de usar plataformas como Magis TV y Flujo TV
Aunque estas plataformas son conocidas por proporcionar acceso gratuito a contenido premium, conllevan riesgos significativos:
- Malware: los usuarios pueden instalar archivos que comprometan la seguridad de sus dispositivos o que sustraigan información privada.
- Problemas legales: al acceder a material pirateado, los usuarios podrían enfrentar consecuencias legales en distintas jurisdicciones.
- Falsas expectativas: pese a los reiterados cambios de nombre, el servicio sigue siendo ilícito y podría interrumpirse sin aviso.