Durante años, la imagen de una inteligencia artificial tomando el control de una computadora evocaba escenas de ciencia ficción. Hoy, esa posibilidad es una realidad -aunque bajo control humano- gracias a la nueva función de OpenAI: ChatGPT Agent, una herramienta que marca un antes y un después en el uso cotidiano de la inteligencia artificial.
Desde mediados de julio, los usuarios suscritos a planes pagos pueden habilitar un entorno virtual donde el modelo ejecuta acciones por cuenta propia: navega páginas, edita archivos, llena formularios, crea documentos y mucho más. El apodo que recibió en redes, "modo Skynet", es exagerado, pero no del todo infundado.
¿Una computadora dentro de ChatGPT?
El llamado Agent Mode funciona como una computadora dentro del navegador: una sesión aislada donde ChatGPT puede realizar acciones encadenadas sin asistencia del usuario. Según explicó OpenAI, el sistema fue diseñado para ayudar con tareas como leer hojas de cálculo, programar scripts, consultar fuentes en línea y automatizar procesos que antes requerían varias ventanas abiertas y múltiples pasos.
Para activarlo, basta con escribir /agent en una conversación o seleccionarlo desde el menú de herramientas. A partir de ese momento, el modelo inicia una "computadora virtual" que responde en tiempo real. Si necesita realizar alguna acción crítica -como enviar correos o ejecutar pagos- solicita una confirmación explícita del usuario antes de continuar.
Qué puede hacer (y qué no) con el nuevo "modo agente" de ChatGPT
Entre las tareas que ya puede ejecutar, se incluyen:
- Generar presentaciones completas desde un calendario de reuniones.
- Buscar información en sitios web y completarla en documentos.
- Ejecutar y depurar fragmentos de código.
- Rellenar formularios, editar hojas de cálculo y enviar archivos.
Sin embargo, el agente no puede realizar transacciones financieras, enviar correos electrónicos por su cuenta ni controlar dispositivos fuera del entorno virtual. Todo ocurre dentro de una sesión aislada, con múltiples capas de protección y supervisión.
OpenAI remarcó que el sistema es capaz de detectar y bloquear solicitudes maliciosas, incluyendo ataques de inyección de prompts. Además, si el usuario se ausenta o cambia de pestaña durante una tarea crítica, la sesión se detiene automáticamente.
¿Una nueva era o una exageración?
El lanzamiento del Agent Mode reavivó el debate sobre los límites del control humano sobre la IA. Aunque el apodo de "Skynet" -en referencia al sistema autónomo de Terminator- circula en redes sociales, la propia OpenAI subraya que se trata de una herramienta colaborativa, no autónoma. "ChatGPT solo actúa cuando se lo pide, y cada paso puede ser revisado, pausado o revertido", señalaron en el anuncio oficial.
Actualmente, la función está disponible para usuarios de los planes Pro, Plus y Team, con distintos límites de interacciones mensuales. Se espera que se extienda próximamente a cuentas empresariales y educativas. Para quienes ya la probaron, el veredicto es claro: es el paso más cercano que ha dado la IA hacia la automatización asistida de tareas cotidianas, pero siempre bajo supervisión humana.