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La Casa Real española enfrenta momentos de tensión interna luego de que la infanta Sofía, la hija menor de los reyes Felipe VI y Letizia, tomara una decisión que habría generado preocupación en la Corona. La joven princesa habría optado por no seguir el camino militar de su hermana Leonor, lo que provocó incomodidad en el rey y abrió una nueva etapa de incertidumbre para la institución monárquica.
Fuentes cercanas a la familia real aseguran que la postura de Sofía contrasta con las expectativas del monarca, quien considera la formación militar como parte fundamental del compromiso institucional de la familia.
Esta situación se produce en un contexto donde la Corona intenta fortalecer su imagen pública, pero enfrenta nuevas tensiones dentro del seno familiar.
La infanta Sofía rechaza la vida militar y planea alejarse del Palacio de la Zarzuela
De acuerdo con medios españoles, la infanta Sofía expresó su negativa a realizar una formación militar, a diferencia de su hermana mayor, la princesa Leonor, quien actualmente cumple con su instrucción en las Fuerzas Armadas. Esta decisión no solo sorprendió a la Casa Real, sino que también generó especulaciones sobre el rol que Sofía desea asumir dentro de la institución.
Asimismo, trascendió que la hija menor de los Reyes de España no tiene intención de regresar a vivir al Palacio de la Zarzuela, luego de su experiencia educativa en el UWC Atlantic College de Gales. Durante su estadía, habría disfrutado de una rutina menos rígida y con mayor autonomía, lo que habría fortalecido su deseo de mantener una vida menos ligada a los compromisos reales.
Rumores de tensión entre Sofía y Letizia por su deseo de independencia
En paralelo a estas decisiones, distintas fuentes apuntan a un deterioro en la relación entre la infanta Sofía y la reina Letizia ya que, al parecer, la diferencia de opiniones respecto al futuro de la joven y su visión sobre el rol institucional han generado choques entre madre e hija. Letizia siempre se mostró firme respecto a la formación y deber de sus hijas dentro de la monarquía, por lo que el deseo de Sofía de tomar otro rumbo habría causado fricciones.
Este cambio de actitud de Sofía también alimentó rumores sobre un distanciamiento emocional entre ambas, especialmente en un momento crucial para la proyección pública de la familia real. El contraste entre el perfil más disciplinado de Leonor y la búsqueda de autonomía de Sofía plantea un nuevo desafío para la imagen de unidad que intenta proyectar la Corona.
