

En esta noticia
El panorama climático en Colombia se complica este 22 de julio. El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) emitió una nueva alerta por condiciones atmosféricas extremas que amenazan con impactar seriamente varias regiones del país.
Granizo, ráfagas de viento y lluvias torrenciales podrían afectar amplias zonas del territorio nacional, especialmente en el norte, centro y occidente del país.
A pesar de una leve disminución general en la nubosidad y las precipitaciones, este martes se espera que persistan fenómenos climáticos severos en regiones vulnerables, con potencial de provocar desbordamientos, inundaciones y afectaciones en la movilidad.
¿Cuáles son las zonas en alerta por lluvias, granizo y viento en Colombia?
De acuerdo con el Ideam, las lluvias más significativas se concentrarán en el norte y centro de la región Pacífica, especialmente en el departamento del Chocó, donde los acumulados de agua podrían alcanzar niveles críticos.

También se esperan precipitaciones fuertes en Bolívar, Sucre, Arauca, Cundinamarca, el oriente de Vichada, Guainía, Caquetá, el norte de Antioquia y el sur de Santander.
Estas condiciones podrían venir acompañadas de granizadas localizadas y descargas eléctricas, además de ráfagas de viento que amenazan con causar daños en techos, árboles y cableado eléctrico.

¿Cuáles son las regiones donde se prevé tiempo seco o lluvias leves?
Aunque buena parte del país estará bajo condiciones inestables, algunas zonas experimentarán un respiro. En departamentos como Tolima, Huila, La Guajira, Meta, Amazonas, Cauca, Nariño y Putumayo, se pronostica cielo parcialmente nublado y baja probabilidad de lluvias.
Por su parte, el archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina mantendrá un cielo mayormente cubierto con lluvias intermitentes, aunque de baja intensidad.
¿Cuáles son las recomendaciones del Ideam ante el fenómeno climático?
El Ideam recomienda a la ciudadanía mantenerse informada a través de los canales oficiales y adoptar medidas preventivas, especialmente quienes viven en zonas cercanas a ríos o laderas inestables. Las autoridades locales ya han sido alertadas para activar sus planes de contingencia.
También se sugiere evitar transitar por carreteras en zonas de montaña durante las horas de mayor precipitación y asegurar techos, ventanas y objetos que puedan ser arrastrados por el viento.













