"A pesar de todo, me parece que cada vez escribo mejor lo que me pasa: lástima que cada vez me vaya peor", dice el protagonista del cuento "Las dos historias", uno de los relatos que integra el libro "Cuentos selectos de Felisberto Hernández", novedad de Editorial Corregidor.

La frase del personaje podría representar una gran parte de la vida del escritor y pianista uruguayo que nació en Montevideo el 20 de octubre de 1902 y falleció en 1964.

"Abundan los datos biográficos acerca de las penurias económicas de Felisberto, quién apenas contó con educación primaria y comenzó a trabajar como pianista de cine mudo a los catorce años", explica Gustavo Lespada, Licenciado en letras (UBA) y seleccionador de los relatos, en el prólogo.

Pero el escritor suplió la escasa educación formal con afán autodidacta y en 1925 publicó su primer libro: "Fulano de Tal".

"Libro sin Tapas" apareció en 1929. "Eran apenas unas pocas hojas abrochadas, sin tapas, apenas parecía un libro", cuenta Lespada y agrega: "Estaba hechos con un papel que el escritor Juan Carlos Onetti llegó a comparar con el que se envuelven los fideos".

Hacia 1940, el autor abandonó totalmente la música y se dedicó de lleno a la literatura. "Cuentos selectos" reúne los trabajos más emblemáticos de Felisberto Hernández a partir de 1943, como "El caballo perdido", "La pelota" y "Mi primera maestra".

También reproduce íntegramente el libro "Nadie encendía las lámparas", que incluye "El Balcón", donde una mujer que suple la muerte de su madre en una relación fetichista; "El acomodador", sobre un joven acomodador de cine que se degrada en el hacer para otros ó "Menos Julia", que cuenta un rito ceremonial donde un hombre disfruta de tocar la cara de jovencitas dentro de un túnel oscuro.

En ese volúmen sobresalen "El cocodrilo" donde el protagonista, un corredor de medias, descubre que puede llorar a piacere para vender más su producto y "La casa inundada", que narra la historia de un pianista que consigue trabajo como remador de un bote en una excéntrica mansión.

"Cuentos selectos" también incluye los relatos "El corazón verde", "La mujer parecida a mí", "Mi primer concierto", "El comerdor oscuro", "Muebles El Canario", "Mur" y "Lucrecia".

"Los climas oníricos, el humor extravagante o absurdo, la animación de objetos y una singular exploración del misterio en las entretelas de los cotidiano, son algunos de los rasgos más reconocibles de su estética", explica el compilador y recuerda una reflexión que hicieran tanto Onetti como Italo Calvino: Felisberto no se parece a ninguno.