La base militar de Texas que Donald Trump quiere convertir en un centro de detención para migrantes
La administración Trump busca consolidar su estrategia migratoria, a través de la ampliación de centros de detención y el refuerzo militar en la frontera.
Desde el inicio de su mandato, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha impulsado una política estricta contra la inmigración ilegal. Un mes después de asumir el cargo, su administración anunció un nuevo paso en esta estrategia: la habilitación de un sitio en Texas para detener a inmigrantes indocumentados mientras se define su situación.
De acuerdo con su equipo de gobierno, este plan busca ampliar la capacidad de detención debido a la saturación de los centros administrados por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE). La instalación seleccionada para este propósito es una base militar en el condado de El Paso, Texas.
Fort Bliss será utilizada como centro de detención
El gobierno de Trump trabaja en el desarrollo de un centro de deportación en Fort Bliss, una base militar ubicada en Texas. Según declaraciones recogidas por The New York Times, esta instalación podría albergar hasta 10.000 inmigrantes indocumentados mientras se procesan sus casos.
Funcionarios familiarizados con el proyecto indicaron que este centro serviría como modelo para futuras instalaciones de detención en otras bases militares del país.
La decisión de utilizar espacios militares responde a la falta de capacidad en los centros de detención actuales y marca un aumento en la participación del Pentágono en la política migratoria.
Apoyo logístico y operativos en la frontera de USA
En un comunicado oficial, Fort Bliss informó que desde finales de enero ha estado brindando apoyo adicional a la misión en la frontera sur, en respuesta a la declaración de emergencia nacional del presidente Trump. La base desempeña un papel clave en la logística de despliegue de fuerzas y equipamiento militar.
Fort Bliss coordina la movilización de personal militar y equipo hacia la frontera.
El aeródromo de Biggs, ubicado en la base, se usa para facilitar vuelos de deportación del ICE.
Se llevan a cabo operaciones de detección, monitoreo y construcción de barreras físicas.