El Gobierno de Estados Unidos, bajo la administración de Donald Trump, ha confirmado una nueva política migratoria que impactará de forma directa a los menores inmigrantes no acompañados, especialmente aquellos de 14 a 17 años.
La orden, que ya está siendo implementada por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), permitirá la deportación rápida de estos jóvenes si no cumplen con los nuevos requisitos migratorios, incluyendo una opción de salida voluntaria o "autodeportación".
Según fuentes oficiales del DHS y documentos internos, la medida tiene como objetivo acelerar las deportaciones masivas, como parte del Proyecto Regreso a Casa de Trump. Este programa busca reducir la presencia de inmigrantes indocumentados en el país, incluso entre los menores de edad.
¿Qué cambia en Estados Unidos con esta nueva política migratoria?
Hasta ahora, los menoresno acompañados que ingresaban a EE. UU. eran transferidos al Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS), que se encargaba de su cuidado y posible reasentamiento con familiares. Con esta nueva orden ejecutiva:
Los menores de 14 a 17 años ahora pueden ser preguntados directamente si desean abandonar el país.
Si aceptan, serán enviados al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) para su deportación.
Si ICE no los recoge en 72 horas, serán enviados a HHS, como en el protocolo anterior.
Esta estrategia se extiende más allá de menores provenientes de México o Canadá, y se aplica también a niños de otras nacionalidades que antes estaban protegidos por leyes migratorias especiales.
Sanciones y consecuencias para quienes no se autodeporten
Además de la opción voluntaria de salida, las nuevas reglas contemplan sanciones severas para quienes rechacen deportarse:
Embargo de bienes y cuentas familiares en ciertos casos.
Multas diarias de hasta 998 dólares por incumplimiento.
Sanciones retroactivas, con deudas que podrían alcanzar el millón de dólares.
Estas penalizaciones están orientadas a disuadir a las familias de mantener a sus hijos en EE. UU. si estos no cuentan con una situación migratoria regular.
¿Qué es el Proyecto Regreso a Casa?
El Proyecto Regreso a Casa es una de las piezas clave de la política migratoria de Trump para su nuevo mandato. Se basa en:
Deportaciones aceleradas sin proceso judicial prolongado.
Incentivos para la salida voluntaria, como:
-
Pasaje aéreo gratuito al país de origen.
-
Un bono de USD 1.000 por abandonar EE. UU. de forma voluntaria.
-
Sin embargo, organizaciones defensoras de derechos humanos han advertido que estos "beneficios" no compensan los efectos devastadores de las deportaciones, especialmente para los menores.
¿Qué pueden hacer las familias inmigrantes?
Aunque la situación genera incertidumbre, las familias deben:
Buscar asesoría legal inmediata si tienen menores de entre 14 y 17 años en situación irregular.
Evitar aceptar una autodeportación sin haber consultado con un abogado.
Informarse sobre sus derechos a través de organizaciones migratorias confiables.