En esta noticia

El clima de fiesta se vivió desde la llegada misma al aeropuerto de Tocumen, conocido como el hub de las Américas por sus innumerables conexiones. Carteles y señalética de todo tipo anunciaban el doble festejo previsto para el 15 de agosto: los 111 años de la inauguración del Canal de Panamá y los 25 años de gestión independiente de los panameños.

El 15 de agosto de 1914, con el SS Ancon, se inauguró el Canal de Panamá, vía fluvial artificial que conecta los océanos Atlántico y Pacífico que le evita a los buques tener que navegar alrededor del Cabo de Hornos en el extremo sur de Sudamérica.

Su construcción es considerada una de las mayores hazañas de ingeniería de la historia.

El Canal utiliza un sistema de esclusas para elevar y descender los barcos a través de un lago artificial de agua dulce, el Lago Gatún, que se encuentra a 26 metros sobre el nivel del mar.

Desde su inauguración el Canal estuvo en manos norteamericanas, pero los acuerdos Torrijos - Carter establecieron la transferencia de la soberanía a Panamá a partir del 31 de diciembre de 1999.

A 25 años de esa fecha, la Autoridad del Canal de Panamá presentó una memoria histórica que recoge los logros, desafíos y aprendizajes.

El informe fue escrito por protagonistas de la historia canalera y concebido pensando en sus verdaderos accionistas: el pueblo panameño. Así, este libro se convierte en un documento de referencia sobre la gestión moderna del Canal, abordando temas como sostenibilidad, innovación, participación ciudadana y visión de futuro, señala el informe.

El evento de presentación de la memoria reunió a autoridades nacionales, líderes de opinión, representantes de organismos internacionales, medios de comunicación, jóvenes líderes y miembros de la comunidad canalera. La obra fue escrita por protagonistas de la historia canalera y concebida pensando en sus verdaderos accionistas: el pueblo panameño.

La jornada inició con las palabras de bienvenida de Ilya Espino de Marotta, subadministradora del Canal y oficial de Sostenibilidad, quien propuso una visión de la vía acuática basada en el compromiso generacional.

"El futuro del Canal está ligado al agua, al agua del futuro. Un recurso que exige nuevas formas de pensar, de cuidar y de actuar. El agua del futuro es resiliente, es compartida, es estratégica. Es el alma del Canal, y protegerla no es una opción: es nuestra responsabilidad", subrayó la funcionaria.

Luego se presentó una valoración crítica de la obra por parte del abogado y líder de opinión Rodrigo Noriega, y de Luis Navas Pájaro, miembro de la Junta Directiva del Canal. Ambos ofrecieron una lectura analítica de la memoria, destacando los principales hitos y desafíos enfrentados en estos 25 años.

Panel de debate

El evento prosiguió con un panel integrado por el actual administrador del Canal, Ricaurte Vásquez Morales, y los ex administradores Jorge Luis Quijano y Alberto Alemán Zubieta. En este espacio compartieron sus experiencias, lecciones aprendidas y reflexiones sobre el modelo panameño de gestión canalera. La moderación estuvo a cargo de la periodista Caroline Schmitt.

Asimismo, el administrador dirigió un mensaje inspirador a la juventud panameña, reafirmando el compromiso con el Canal del futuro, el agua como eje estratégico y la sostenibilidad como principio transversal.

"Si reconocemos la historia, la única cosa que podemos hacer hoy es compartirla con las generaciones que vienen, para que no sea parte de un olvido, sino parte de la esencia misma de nuestra nacionalidad y nuestro propósito de vida.", aseveró Ricaurte Vásquez Morales.

Para finalizar, se entregó la memoria impresa a 30 jóvenes líderes de todo el país y de la cuenca del Canal, como símbolo de continuidad y responsabilidad histórica.

Como parte de esta celebración, también se realizó una entrega simultánea de la obra en 35 bibliotecas públicas del país y se habilitó un código QR para su descarga digital.