En una semana marcada en lo político por el cónclave del gobierno y la Nueva Mayoría, la aprobación a la presidenta Michelle Bachelet cayó cuatro puntos y se ubicó en un histórico 22%. Según los resultados de la encuesta Nº82 de Plaza Pública Cadem, la desaprobación, en tanto, aumentó cinco puntos, a un 70%.
De acuerdo a la muestra, para un 60% de los encuestados el gobierno va por la dirección equivocada y un 62% no cree que la presidenta tenga un plan para solucionar los principales problemas que puede enfrentar Chile en los próximos años.


La evaluación a las reformas estructurales del gobierno sigue a la baja. La reforma laboral tiene una aprobación mínima del 22% y un rechazo del 53%, mientras que la reforma tributaria retrocede al 23%, mientras que un 59% la desaprueba.


En relación al progreso económico, el 62% de las personas creen que la economía está estancada, el 20% estima que está retrocediendo y sólo un 17% cree que avanza.


Además, un 84% considera que la delincuencia ha aumentado en el país durante el último año, 8 puntos más en comparación a junio de este mismo año. Asimismo, siete de cada 10 personas siente mucha o bastante preocupación de ser víctima de un delito, y un 90% considera que la delincuencia es hoy más violenta con respecto al año anterior.


En medio de la caída del respaldo popular al gobierno, el ministerio de Hacienda valoró en términos generales el diagnóstico del Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre la economía chilena, aunque manifestó su discrepancia con la recomendación que hizo el organismo multilateral en materia laboral.


El titular de la cartera, Rodrigo Valdés, destacó que el Fondo indicara que la economía chilena "está fundamentalmente sana" y que "tenemos un sistema financiero sólido, incluyendo a los bancos".


La gran discrepancia tiene que ver con los cambios que empuja el Ejecutivo en materia laboral. El informe del FMI destacó que promover la eficiencia y la flexibilidad del trabajo debería mantenerse como una prioridad y que los cambios "no deberían suceder a expensas" de la reducción de la eficiencia del mercado laboral.
"Aquí no se trata sólo del funcionamiento del mercado, también el tema de equidad es fundamental", dijo Valdés.