En su presentación en sociedad como country manager de Chevron, la venezolana Ana Simonato remarcó que, además de lograr costos competitivos, uno de los factores claves para seguir atrayendo inversiones a Vaca Muerta es "mantener las políticas de libre mercado".
"Tenemos que trabajar con el Gobierno para asegurarnos de que podemos proteger nuestra inversión. Este es el momento de tomar decisiones. El desafío, hoy, es generar el entorno empresarial que permita atraer inversiones. Tener un marco regulatorio mucho más estable y predecible", dijo Simonato durante su participación en el Encuentro con los CEO de AOG, la exposición de la industria energética que se realiza en La Rural.
"Se deben permitir los movimientos de capital. Es algo crítico a largo plazo. También, respetar las inversiones existentes. Los costos tienen que ser competitivos. Y se deben mantener las políticas de libre mercado", continuó su enumeración. "Si tenemos todos estos elementos, hay un gran futuro juntos", aseguró.
Simonato asumió en julio como número uno en el país de Chevron. Ejecutiva con 27 años de trayectoria en la industria energética, desempeñó la última década en el Permian de los Estados Unidos. Desempeñó, de hecho, un papel clave en la integración de PDC Energy, petrolera independiente de shale que Chevron compró en 2023, por u$s 7600 millones.
La estadounidense es una de las pioneras de Vaca Muerta. Firmó, en 2012, el memorándum de intención original con YPF, que dio lugar, luego, a un proyecto de mayor escala, de u$s 1240 millones a 10 años, rubricado en 2013. El marco legal de ese convenio dio lugar a un decreto, primero, y a una ley, después, a los que la industria energética, coloquialmente, identificó con el nombre de esta petrolera.
Actualmente, Chevron ejecuta un programa de u$s 500 millones anunciado en 2023. Es para desarrollar el bloque El Trapial, que había comprado en 2022. Adicionalmente, por aquellos convenios, tiene una participación no operada, del 50%, en Loma Campana y Norambuena, ambas con YPF como socia.
Este martes, en la AOG, Simonato precisó que, actualmente, Trapial está en una producción de 25.000 barriles diarios, que escalará a 30.000 a fin de año.
"La roca, acá, es fabulosa. La calidad y productividad es muchísimo mejor que algunos yacimientos del Permian. Pero, también, es más compleja. Necesita más tecnología", comparó.
Otra diferencia es la escala: mientras el Permian tiene 75 millones de acres, Vaca Muerta cuenta solo con 8, contrastó. "Vaca Muerta creció rápidamente. Pero, todavía, hay mucho por hacer. El Permian tiene más escala, más cantidad de perforaciones, más fracturas. Eso le da una competitividad enorme", distinguió. Por eso, insistió en que las mejoras de competitividad que se logren en la formación argentina "es la única forma que tenemos de ser competitivos y estar preparados frente a cualquier escenario; más, contra factores que no podemos controlar, como los precios".