

Un equipo de investigadores italianos encontró una segunda ciudad subterránea bajo las pirámides de Egipto. A pesar de que sus conclusiones no fueron publicadas en revistas científicas ni validadas por expertos independientes, los investigadores afirman haber detectado estructuras ocultas mediante tecnología de radar, lo cual podría representar un descubrimiento sin precedentes.
El equipo estuvo conformado por Corrado Malanga, Filippo Biondi y Armando Mei. Según informaron, recientemente identificaron "cilindros verticales" ubicados a 600 metros debajo de la pirámide de Kefrén, una de las tres grandes construcciones de Giza. Según los profesionales, estas estructuras contendrían cámaras, sistemas hidráulicos y conexiones hacia otras formas arquitectónicas, formando lo que denominan una "ciudad oculta".

La historia marcaría un punto de inflexión con su aparición, dado que pareciera incluso ubicar el legendario "Salón de los Registros", el cual está vinculado en relatos antiguos a documentos sobre la civilización egipcia y el continente perdido de la Atlántida.
¿Qué encontraron debajo de las pirámides de Egipto?
Los investigadores afirmaron haber detectado formaciones similares bajo la pirámide de Menkaure, lo que reforzaría, según ellos, la posibilidad de que exista una segunda red urbana oculta bajo el desierto de Giza.
Es importante resaltar que ninguna de estas afirmaciones fue reconocida por la comunidad científica, lo que generó un fuerte rechazo entre especialistas de diversas disciplinas.
El egiptólogo Zahi Hawass, exministro de Antigüedades de Egipto, desestimó por completo la teoría de una ciudad oculta en Giza. De hecho, las calificó de "tonterías" y "falsas noticias", sin ningún sustento científico.
Por su parte, Lawrence Conyers, profesor de la Universidad de Denver, explicó que los dispositivos que fueron utilizados por el equipo italiano no tienen la capacidad técnica para alcanzar profundidades como las que mencionan. También cuestionó la interpretación de los datos, describiéndola como exagerada y sin fundamento claro.
La crítica también llegó desde el ámbito de la física. La alemana Sabine Hossenfelder, reconocida teórica, cuestionó duramente la metodología de los investigadores y los acusó de interpretar de manera arbitraria las imágenes obtenidas por tomografía.
Las repercusiones sobre la ciudad oculta en Egipto
Este tipo de afirmaciones generan especial escepticismo entre los expertos, dado que las pirámides fueron históricamente objeto de numerosas teorías pseudocientíficas y mitos sin respaldo, que alimentaron desde ideas de civilizaciones perdidas hasta la intervención de seres extraterrestres, formando parte del fenómeno conocido como "arqueomisterio".
De allí la insistencia de la comunidad académica en que la información vinculada a estos monumentos sea cuidadosamente revisada y científicamente comprobada antes de llegar al público.















