Científicos de Estados Unidos descubrieron un gen que tiene una función fundamental en la regulación de nuestro reloj interno. Es el responsable en decirnos cuándo comer y dormir, entre otras cosas. Los investigadores esperan que esta hallazgo de origen a nuevas medicaciones par controlar el jet lag y mantener alerta a los trabajadores con turnos nocturnos.

Los ritmos carcadianos tienen una función importante en el control de las funciones del cuerpo de muchos animales. Los científicos saben que el reloj interno en los mamíferos sigue funcionando aún sin recibir información del mundo exterior. Roedores aislados en cámaras oscuras con temperatura controlada, por ejemplo, siguen actuando en ciclos de 24 horas.

Sabemos que nuestro reloj interno puede “ajustarse con el tiempo, como ocurre cuando uno cambia de huso horario. El corazón, el hígado y los intestinos tienen sus propios relojes, los cuales se ajustan a diferentes velocidades de acuerdo a las circunstancias.

Pero si bien se identificaron los genes involucrados en el ritmo carcadiano de los órganos, se sabe poco sobre el “reloj maestro del cerebro que es el que coordina todas estas reacciones.