La autoridad de tránsito de Nueva York está tomando medidas para fortalecer su defensa contra el terrorismo, después de haber recibido críticas por su demora en utilizar los fondos asignados a tal fin.
La Metropolitan Transportation Authority (MTA) dio a conocer dos programas: un sistema de vigilancia que insumirá u$s 212 millones y un plan para conectar las plataformas de los subtes de la ciudad y brindar un servicio de telefonía móvil.
La estrategia de MTA contra el terrorismo en el sistema de subterráneos se basó en la vigilancia de los 7,7 millones de personas que diariamente utilizan ese medio de transporte. El organismo gastó millones de dólares en una campaña de concientización, empapelando los vagones del subterráneo con pósters que decían “Si ve algo, diga algo .
Detrás de escena, está desarrollando una estrategia más sólida. Recibió fondos federales por casi u$s 600 millones para sistemas de seguridad, pero hasta ahora sólo utilizó una pequeña porción del dinero.
Ahora anunció un contrato por u$s 212 millones con Lockheed Martin para colocar un sistema de vigilancia que consiste de miles de cámaras y detectores de movimiento.
La ciudad también está licitando entre las telefónicas una licencia potencialmente lucrativa por diez años para instalar y operar su servicio telefónico.
La iniciativa revierte años de oposición, ya que se la consideraba demasiado cara. Sin embargo, algunos sostienen que los teléfonos celulares podrían sumar riesgos al sistema de transporte, dado que se cree que fueron utilizados para detonar las bombas de Madrid en marzo de 2004.