Estados Unidos y la eurozona experimentarán una caída en la producción que se extenderá durante cuatro trimestres consecutivos y que no finalizará hasta mediados de 2009, según un informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
La OCDE, que hace sólo unos pocos meses pronosticó que la mayoría de las economías de la eurozona mantendrían el mismo ritmo de crecimiento en la segunda mitad de este año –y que el Reino Unido entraría en una leve recesión técnica– ahora augura cuatro trimestres consecutivos de contracción para Estados Unidos, los países que utilizan el euro y los estados miembro de la OCDE en general.
“Muchas de las economías de la OCDE enfrentan o están a punto de enfrentar una recesión prolongada de una magnitud que no se ve desde principios de la década de 1980 , señaló el think tank integrado por 30 países ricos en el último Panorama Económico, publicado ayer.
Durante los próximos dos años el número de desempleados en esas economías podría aumentar en 8 millones. Sin embargo, es probable que la inflación disminuya en todos los estados miembro de la OCDE, y que algunos de ellos enfrentan un pequeño riesgo de deflación.
Es probable que el Reino Unido –para el cual la OCDE había pronosticado en septiembre pasado una recesión técnica durante la segunda mitad de 2008– experimente un crecimiento en el producto bruto interno real de 0,8%, inferior al 1,2% que tenía hace menos de tres meses atrás y la mitad de la tasa de crecimiento pronosticada hace seis meses.
Es probable que en 2009 el crecimiento del Reino Unido se contraiga 1,1%. La recuperación comenzará en la segunda mitad de 2009 pero seguirá siendo poco sustancial. Y en 2010 se verá una expansión del PIB del 0,7%
La organización con casa matriz en París enfatizó que las incertidumbres vinculadas a su último pronóstico son “excepcionalmente elevadas . Las más significativas están relacionadas con la velocidad con la que se supere la crisis del mercado financiero, la cual, a criterio de la OCDE, es el principal conductor de la actual desaceleración económica.