¿Cuál de todas las medidas que se conocieron ayer es la más relevante?
Empezaría por la suba de tasa de las Lebacs, no por importancia sino porque es una medida diferente a las otras en términos del efecto. En el sentido económico, en el contexto actual, es lógico que el Banco Central incremente la tasa de las letras, que en definitiva representa un alza de lo que se paga por los plazos fijos en pesos. Esto tiene un efecto directo, positivo, pero no deja de ser una medida que llega tarde. Muchas veces es mejor tarde que nunca, pero también es cierto que tres puntos no le cambian la vida a nadie.
¿Y cuáles serán las consecuencias de las demás medidas?
Ese es otro tema, es un comportamiento totalmente distinto. Que las aseguradoras tengan que vender sus dólares y que, a la vez, los importadores tengan menos margen de compra es una clara señal de debilidad. Dejan en evidencia el problemas de la escasez de reservas. Como no pueden atacar el faltante de dólares por el lado correcto, lo hacen por medio de restricciones. En este caso, es todo lo contrario a lo de las tasas, es más vale nunca que tarde. Creo que es una mala señal. Igualmente no es algo que me sorprenda, pero esperaba otra medida.
¿Qué esperaba?
Sabíamos que después de las elecciones iban a tomar nuevas medidas. Sin embargo creía que podían restringir el dólar ahorro. Lo que pasa es que optaron por cuidar el objetivo electoral. Si hubieran achicado el cupo de dólar ahorro se habría notado más, en cambio nadie se entera si se limitan los dólares a los importadores. Si bien esto le hace mal a la economía, no se nota tanto.
¿Y qué opina sobre el mercado de futuros?
No hay muchos cambios con respecto a lo que venía pasando. Es más de lo mismo, algo insostenible. Lo preocupante es que la venta masiva del Central no le está llevando tranquilidad a nadie. Todo lo contrario, están regalando a futuro la plata de los argentinos; están comprometiendo la política monetaria del próximo gobierno.