La agitación y el terrorismo en Medio Oriente son una amenaza de seguridad tan grave para Europa como lo fue la Unión Soviética durante la guerra fría, advirtió el ex jefe de M16, el servicio de inteligencia británico.
Nunca antes fue tan difícil de interrumpir los ataques violentos en suelo europeo, y hoy es más probable que se produzcan, afirmó Sir John Sawers a Financial Times en la primera entrevista que concede desde que dejó su cargo en noviembre.
Los asesinos de Charlie Hebdo en París y la avalancha de medidas drásticas contra los extremistas islámicos en todo Europa son un llamado de atención hacia una "amenaza que se ha intensificado", afirmó el ex jefe de espías de 59 años.
"La rigidez que mantuvimos en el umbral de Europa durante dos o tres décadas generó una serie de problemas y ahora la turbulencia que tuvimos en nuestras propias narices está creando otro grupo de problemas en un sentido más grave porque los disturbios en Siria, Irak, Libia y Yemen crean toda una serie de desafíos para nosotros", afirmó Sir John.
Los miles de europeos que luchan contra organizaciones extremistas como Estado Islámico (EI) y al-Qaeda fueron "el vector transmisor de esa amenaza terrorista a Europa".
Representan una amenaza terrorista que nunca fue tan grave porque están más de mil kilómetros "más cerca de Europa que cuando estaban en Afganistán y porque están aprendiendo de su propia experiencia y adoptando tácticas más crudas", agregó.
Si bien describió a Siria como "el plato fuerte" del problema, agregó que todo Medio Oriente se encuentra en un punto de inflexión. "Deberíamos preocuparnos por toda la región," afirmó citando el derrumbe de gobiernos estables en muchos países, la dramática caída del precio del petróleo, la incertidumbre que generan los problemas de salud del rey saudita y las tensas negociaciones internacionales con Irán sobre su programa nuclear.
Sir John, un ex alto diplomático y experto en Medio Oriente que está por asumir una nueva función como presidente y socio de Macro Advisory Partners, una consultora sobre riesgo geopolítico, también advirtió que dado que el mundo tiene la la atención puesta en Irak y Siria, hay países como Libia y Yemen que se están convirtiendo en nuevos puntos de conflicto.
"En este momento, la mayor parte del conflicto en Libia tiene que ver con cuestiones internas, pero obviamente hay un ambiente allí que podría ser propicio para las organizaciones terroristas. Existe un problema serio en el sur. Es necesario hacer todos los esfuerzos posibles para tratar de estabilizar el país antes de que la amenaza se extienda a otros lugares.
Reconoció que son limitadas las medidas que pueden tomar los gobiernos occidentales. "Una de las lecciones que dejaron los últimos 15 años es que Occidente no puede imponer soluciones nuevas a estos países. Tienen que encontrar su propia manera de seguir adelante".
Al referirse al debate sobre la vigilancia de las comunicaciones, Sir John dijo que debería haber restricciones a las comunicaciones totalmente encriptadas, que son inaccesibles a los gobiernos.
"Nunca quisimos tener zonas peligrosas para la policía en nuestras comunidades, pero los medios de comunicación totalmente privados constituirían áreas en las que pueden actuar malhechores de todo tipo terroristas, criminales, pedófilos". Y agregó: "en una sociedad libre, no se puede tener seguridad absoluta, y en una sociedad segura, no se puede tener una libertad totalmente genuina. Debe haber algún compromiso y se debe buscar maximizar a ambas".
Según Sir John, estos temas nuevos son la punta de mayores desafíos que enfrentarán los gobiernos y las grandes empresas en los próximos años.
