El foco estaba puesto en el petróleo norteamericano ayer cuando los datos oficiales señalaron que las existencias de crudo local alcanzaron un nuevo récord debido a que la creciente producción de shale superó el incremento de la producción refinera.
La producción de petróleo en Estados Unidos aumenta gracias al crecimiento de la extracción proveniente de formaciones rocosas como Bakken Shale en Dakota del Norte y Eagle Ford en Texas. El gobierno en Washington espera que la producción se incremente en 1,1 millones de barriles diarios este año a 8,4 millones b/d.
Al mismo tiempo, las importaciones sorprendentemente resistieron frente a la mayor oferta local, lo que ayudó a elevar las existencias a niveles récord. Estados Unidos también tiene vigente una prohibición de exportar crudo, por lo que el petróleo queda atrapado dentro del país.
Cifras de la Administración de Información Energética (AIE) dadas a conocer ayer muestran que las reservas de crudo comercial habían trepado 3,5 millones de barriles a 397,7 millones en la semana finalizada el 18 de abril, el nivel más alto desde que la agencia empezó a recopilar esas cifras en 1982.
Analistas de BNP Paribas comentaron que los datos demuestran que EE.UU. está teniendo problemas para acomodar la creciente producción local, que la semana pasada llegó a 8,36 millones b/d.
El mayor incremento otra vez se produjo en la Costa estadounidense del Golfo de México, donde los inventarios subieron a un récord de 209,6 millones.
El crudo se acumula allí, que es el centro de refinación más grande del mundo, porque los nuevos ductos que conectan la región con un gigantesco complejo petrolero en Oklahoma empezaron a operar. Como resultado, las existencias en Cushing, el punto de entrega de los contratos de futuros de West Texas Intermediate (WTI), casi se redujeron a la mitad durante el año pasado.
El informe de la AIE mostró que habían caído en casi 800.000 barriles a 26 millones de barriles, cerca del nivel de almacenamiento mínimo que los tanques necesitan para operar normalmente.
Dado que hay más refinerías que planean tareas de mantenimiento, la consultora Energy Aspects espera que las existencias en la Costa norteamericana en el Golfo de México superen los 260 millones de barriles en junio, antes de volver a caer cuando se reanude esas tareas de refinación.
