BBVA está negociando la venta de su unidad de banca minorista en Chile, una medida que podría mejorar la posición de capital de la entidad española y reducir su foco geográfico en América latina.
El segundo banco más grande de España en términos de valor de mercado anunció ayer que busca una posible venta después de que Bank of Nova Scotia expresara su interés en adquirir hasta el 100% de la unidad.
BBVA Chile tiene una capitalización cercana a 1200 millones euros, pero el banco dijo que no está considerando retirarse completamente del país, sino sólo vender la división de banca minorista. BBVA también tiene en el país una unidad de créditos al consumo.
Los analistas de Berenberg aseguran que éste es un giro en la habitual estrategia de la compañía y señalaron que el grupo "está reduciendo su foco geográfico y busca registrar ganancias de capital".
El management de BBVA con anterioridad había señalado que sentía que su participación de mercado en Chile no era suficientemente elevada, por lo que era posible que el banco decidiera comprar otro activo en el país o vender.
El banco tiene una participación de 68% en BBVA Chile, mientras que un 29% pertenece a la familia chilena Said y el resto de las acciones cotizan en bolsa.
Ayer BBVA dijo que no sabía si las negociaciones con Bank of Nova Scotia van a conducir a un acuerdo ni cuáles serán los términos si finalmente se llega a un entendimiento.
BBVA hace tiempo que tiene una fuerte presencia en América latina, con operaciones en Argentina, Perú, Uruguay, Paraguay, Venezuela y Chile. México es una de las unidades más grandes del grupo, representa cerca de 40% de las ganancias.
Sin embargo, la entidad no la pasó bien el año pasado en algunas partes de América latina, particularmente en México por el evidente cambio de política desde que asumió la nueva administración de Estados Unidos.
