

Los mayores de 65 años residentes en Madrid tienen desde este año una nueva herramienta para mejorar su calidad de vida: la Tarjeta +65, una credencial que permite acceder a transporte gratuito, descuentos en medicamentos, beneficios en actividades culturales y más.
La iniciativa, impulsada por la Comunidad de Madrid y respaldada por el Ayuntamiento, busca unificar en una sola tarjeta múltiples ventajas dirigidas a la población sénior, que en la región ya supera el 20% del total de habitantes. El objetivo: facilitar la autonomía, el ahorro y el acceso a servicios esenciales para los mayores.
¿Qué incluye la Tarjeta +65? Transporte gratis y más ventajas
Uno de los principales beneficios es el abono transporte gratuito para mayores de 65 años, ya vigente en toda la región desde el 1 de enero de 2023. Este abono permite usar sin coste el Metro de Madrid, autobuses de la EMT, Cercanías Renfe y transporte interurbano, sin importar la zona tarifaria.
Además, la Tarjeta +65 permite acceder a:
Descuentos en farmacias adheridas al sistema de recetas electrónicas.
Rebajas en entradas a museos y teatros dependientes del gobierno regional.
Acceso prioritario en algunos centros de salud y trámites municipales.
Descuentos en actividades deportivas y viajes organizados por el programa "Madrid para mayores".
La tarjeta también se puede vincular a otros programas como Mayores Activos, que ofrece talleres gratuitos de memoria, nuevas tecnologías y actividad física.

Cómo solicitarla: requisitos y trámites
La Tarjeta +65 está disponible para cualquier persona empadronada en la Comunidad de Madrid que haya cumplido los 65 años, sin necesidad de estar jubilado ni cumplir con ningún requisito de renta.
El trámite puede realizarse de forma presencial en las oficinas de atención al ciudadano o por vía telemática a través del portal de la Comunidad de Madrid. Para obtenerla, se necesita el DNI/NIE, una foto reciente tipo carnet y el certificado de empadronamiento, salvo que el sistema pueda verificar automáticamente la residencia.
El tiempo de entrega suele ser de entre 10 y 15 días hábiles, y la tarjeta tiene una vigencia indefinida, salvo que se pierda o se cambie de domicilio a otra comunidad autónoma.
Una medida que busca dignificar el envejecimiento
Según datos del INE, Madrid superará los 1,5 millones de personas mayores de 65 años en 2030. Este crecimiento ha impulsado políticas públicas que promueven el envejecimiento activo, la inclusión digital y el acceso equitativo a la cultura y el ocio.

Organizaciones como la Unión Democrática de Pensionistas (UDP) valoran positivamente la tarjeta, aunque reclaman que se amplíen aún más los beneficios, especialmente en salud bucodental, óptica y cuidados domiciliarios. "Toda medida que reconozca el aporte de los mayores a la sociedad y mejore su autonomía es bienvenida", señalaron en un comunicado reciente.















