Cuando un niño cumple años o toma la comunión en España, es habitual que reciba regalos de familiares y amigos. En muchos casos, esos obsequios se traducen en sobres con dinero en efectivo o transferencias por Bizum.
Lo que a primera vista parece un gesto inocente y tradicional puede esconder consecuencias fiscales serias si no se cumplen ciertos requisitos. La Agencia Tributaria considera ese dinero como una donación, y como tal, debe declararse.
Con los sistemas bancarios cada vez más digitalizados, Hacienda tiene mayor capacidad para rastrear y cruzar información sobre transferencias, movimientos de efectivo e ingresos atípicos.
Por ello, los padres que depositen o transfieran dinero recibido por sus hijos deben tener claro que, a partir de ciertos montos, estarán obligados a declarar la operación y justificar su origen. De lo contrario, podrían enfrentarse a sanciones que, en los casos más graves, alcanzan el 150% del importe no declarado.
¿Qué cantidad se puede regalar sin declarar a Hacienda?
La clave está en los límites. Aunque en teoría todo regalo debe tributar, existen umbrales a partir de los cuales la declaración es obligatoria. Por ejemplo, según la Ley 10/2010 contra el blanqueo de capitales, las transferencias entre familiares que superen los 6000 euros deben estar justificadas.
Incluso si el importe no llega a ese límite, Hacienda puede solicitar información adicional si detecta operaciones sospechosas.
Además, los bancos están obligados a informar a la Agencia Tributaria si recibes o ingresas más de 3000 euros en efectivo, o si realizas una transferencia superior a 1000 euros, lo que activa mecanismos de control. Y en el caso de aplicaciones como Bizum, si el total de las transferencias supera los 6000 euros, también entra en juego la obligación de declarar.
Desde la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) advierten: "Cualquier ayuda de los padres, como el dinero para comprar un coche o una vivienda, se considera una donación, y hay que tributar por ello en el Impuesto de Sucesiones y Donaciones".
¿Qué pasa si no declaras una donación?
No declarar correctamente el dinero que se da como regalo puede salir caro. Hacienda contempla diferentes niveles de sanción según la cantidad omitida y la intención de ocultarla:
Infracción leve: si la cantidad no supera los 3.000 euros, la multa puede ser del 50% del importe no declarado.
Infracción grave: si la cifra es mayor y hay indicios de ocultación, la sanción sube al 100% del total.
Infracción muy grave: si se utilizan medios fraudulentos, la multa puede llegar al 150% del dinero evadido.
El portal especializado Preahorro lo deja claro: "No presentar el modelo 651 en caso de donación puede considerarse una infracción muy grave, sobre todo si Hacienda interpreta que hubo voluntad de ocultar la operación".
¿Cómo evitar sanciones de Hacienda al regalar dinero a tus hijos?
Para estar en regla y evitar disgustos, los expertos recomiendan:
Llevar un registro del dinero recibido o entregado, especialmente en fechas señaladas como comuniones.
Declarar las donaciones a través del modelo 651, en un plazo máximo de 30 días hábiles desde la entrega del dinero.
Consultar con un asesor fiscal, ya que el tratamiento del Impuesto de Sucesiones y Donaciones depende de la comunidad autónoma en la que resides.
Además, si el dinero no es un regalo sino un préstamo, deberá justificarse mediante un contrato y presentarse el modelo 600, aunque no conlleve coste fiscal.
Hacienda controla cada vez más las operaciones familiares
En un contexto de mayor vigilancia fiscal, incluso los gestos más cotidianos pueden estar bajo la lupa. La OCU lo resume así: "Una transferencia entre padres e hijos puede parecer inocente, pero Hacienda la interpretará como una donación salvo que se justifique claramente lo contrario".
Por eso, ya sea por una comunión, una boda o simplemente por ayudar a un hijo en apuros, es fundamental entender que los movimientos de dinero entre familiares también tributan. No declarar una donación puede resultar mucho más caro que el propio regalo.