La Agencia Tributaria ha implementado un cambio significativo en la fiscalidad que afecta a los propietarios de múltiples inmuebles. A partir de este momento, Hacienda multará a los propietarios con más de una vivienda si no la utilizan como residencia principal o si no la declaran de manera adecuada.
Fuentes del sector fiscal indican que esta modificación tiene como objetivo “reforzar el control sobre el parque inmobiliario y evitar posibles fraudes fiscales”.
Esta medida se inserta dentro de una estrategia más amplia de supervisión del uso y la tributación de las propiedades en España.
El nuevo criterio amplía el alcance de las sanciones, que “hasta el momento solo afectaban a quienes vendían una propiedad por debajo del precio de mercado”, según la normativa anterior.
Con esta actualización, todas las segundas residencias quedan bajo supervisión, independientemente de su uso.
¿Quiénes deben declarar y cuándo la segunda propiedad?
Según los expertos de Tax Down, para declarar una segunda residencia en la renta, es necesario dirigirse al apartado “Bienes inmuebles no afectos a actividades económicas”. En este apartado, se debe indicar que la vivienda no constituye la residencia habitual y que permanece desocupada durante el año.
Hacienda recuerda que los contribuyentes con una vivienda adicional a su residencia habitual están obligados a incluirla en su declaración, sin importar si la utilizan o no.
El incumplimiento de esta obligación puede resultar en inspecciones y sanciones. Existen dos escenarios principales que determinan la forma en que se declara la segunda vivienda:
Si la vivienda está alquilada Los ingresos generados deben declararse como rendimientos del capital inmobiliario. En este caso, “Hacienda aplica una tributación específica que varía según los ingresos obtenidos y los gastos deducibles”, detallan desde Tax Down.
El propietario tiene la posibilidad de deducir ciertos gastos asociados al inmueble, pero debe acreditar todos los movimientos y mantener los contratos en orden. Si la vivienda está vacía Incluso si la segunda residencia no genera ingresos, debe ser incluida en la declaración de la renta.
En este caso, Hacienda imputa un rendimiento mínimo sobre el valor catastral del inmueble, lo que conlleva un pago proporcional. Los contribuyentes deben marcarla como “vivienda vacía”, lo que permite calcular el rendimiento imputado en función del valor catastral, ya sea actualizado o no.
Multa por no declarar la propiedad a Hacienda
No incluir una segunda residencia en la declaración de la renta** puede acarrear sanciones económicas significativas. La Agencia Tributaria calcula un rendimiento imputado sobre la vivienda desocupada, aplicando un porcentaje sobre su valor catastral:
- 2% del valor catastral si no ha sido revisado en los últimos 10 años.
- 1,1% del valor catastral si ha sido actualizado mediante valoración colectiva en la última década.
- 1,1% sobre el 50% del valor de la vivienda si no tiene valor catastral asignado. El incumplimiento de esta obligación “puede ser considerado un fraude fiscal,“ advierten los asesores. En tales circunstancias, el contribuyente se expone a multas adicionales y recargos por parte de la Agencia Tributaria.
- Adicionalmente, Hacienda tiene la facultad de revisar de forma retroactiva las declaraciones de los últimos cuatro años, lo que incrementa el riesgo financiero para los propietarios que no regularicen su situación. Es fundamental que los contribuyentes sean conscientes de estas implicaciones para evitar consecuencias desfavorables.
Todo lo que necesitas saber para declarar tu segunda vivienda ante Hacienda en 2025
Declarar una segunda vivienda ante Hacienda es obligatorio, incluso si no la alquilas ni la utilizas durante el año. No hacerlo puede conllevar multas y recargos. Sigue este paso a paso para incluir correctamente el inmueble en tu declaración de la renta y evitar sanciones. Accede al apartado correcto en la renta En el borrador o modelo de la renta, busca el apartado: “Bienes inmuebles no afectos a actividades económicas”.
Allí deberás:
- Marcar la opción “inmueble de uso propio o vacío”.
- Indicar la referencia catastral y la dirección completa.
- Especificar que no es tu residencia habitual. Verifica el valor catastral Consulta el valor catastral en el recibo del IBI (Impuesto sobre Bienes Inmuebles). Este valor determina el cálculo del rendimiento imputado. Tener el valor actualizado evita errores en la imputación.
Indica si la vivienda está alquilada o vacía
Si está alquilada: Declara los ingresos como rendimientos del capital inmobiliario. Podrás deducir gastos como comunidad, reparaciones o seguros, siempre con facturas.
Si está vacía: Marca la opción “vivienda vacía” para que Hacienda calcule el rendimiento imputado sobre el valor catastral. Conserva todos los comprobantes y contratos: Hacienda puede solicitarlos.
Calcula el rendimiento imputado
Hacienda sumará el rendimiento al total de tus ingresos anuales. Ejemplo: Si tu segunda vivienda tiene un valor catastral de 150.000 euros y no fue revisado en 10 años, se aplicará un 2%, lo que equivale a 3000 euros imputables** a la base imponible. Este importe se suma a tus ingresos declarados y puede modificar el resultado final.
Revisa y presenta la declaración
Antes de enviarla, verifica que los datos sean correctos. Guarda: El justificante de presentación, el recibo del IBI, toda la documentación del inmueble. Hacienda puede revisar las declaraciones hasta cuatro años atrás.
Si olvidaste declararla, regulariza tu situación Si no declaraste una segunda vivienda en ejercicios anteriores, presenta una declaración complementaria lo antes posible.
Esto permite reducir las sanciones y los intereses de demora por parte de la Agencia Tributaria. No esperes a recibir un requerimiento: la regularización voluntaria siempre tiene menor penalización.