El secretario personal de Benedicto XVI, monseñor George Gänswein ha celebrado la elección del Papa León XIV y la ha calificado como "esperanzadora". En sus declaraciones para el medio Corriere della sera, el religioso ha festejado el resultado del cónclave por tratarse de un "puente" entre el papado de Francisco, del que fue sumamente crítico y el de Ratzinger.
Gänswein, de 68 años, fue durante dos décadas la mano derecha del pontífice alemán, quien lo nombró en 2012 prefecto de la Casa Pontificia, uno de los cargos más influyentes de la Curia Romana, y arzobispo de Urbisaglia. Además, es conocido por su ferviente oposición al papa Francisco, quien lo nombró en junio de 2024 como nuncio (diplomático vaticano) en Lituania, Estonia y Letonia.
Como uno de los mayores exponentes del ala conservadora de la Iglesia Católica, Gänswein ha celebrado la apertura de una "fase nueva". "Percibo un cierto alivio difuso. Ha terminado la era de la arbitrariedad. Se puede contar con un papado que puede garantizar la estabilidad y que cuenta con las estructuras existentes, sin darlas vuelta o trastornarlas", dijo en un diálogo con el medio italiano.
Las duras críticas del secretario de Benedicto XVI al papa Francisco
"Cuando vi que salió al balcón y tenía un texto en la mano, me dije: empezó bien", destacó el arzobispo. "León XIV creará puentes como el predecesor, pero en un contexto y con un estilo distinto a Francisco. En la Iglesia de hoy existen grandes tensiones y afuera hay conflictos espantosos. Creo que ahora hace falta claridad doctrinal", continuó.
Para Gänswein, "la confusión de estos años debe ser superada". En este sentido, el religioso considera que es necesario un regreso a la tradición: "las instituciones de la Iglesia no son ni una lepra ni una amenaza contra el Papa", aseveró.
"Están ahí para dar ayuda a los pontífices, que tienen que dejarse ayudar. No se puede gobernar solos, desconfiando de las propias instituciones", arremetió, en referencia directa la postura del papa Francisco respecto de la curia romana.
Polémica en el Vaticano: el secretario de Benedicto XVI felicitó a al Papa León XIV por poner "fin a la era de la arbitrariedad"
"Creo que seguramente el papa León XIV irá vivir al Palacio Apostólico, un palazzo destinado a que allí habiten los papas, es su función histórica. Me gusta pensar que, a la noche, en el Palacio Apostólico, el Papa prenderá la luz y la gente sabrá que está ahí", dijo el exsecretario de Benedicto XVI.
Sin lugar a dudas, el triunfo de Prevost ha sido del agrado de Gänswein, quien declaró que "a nivel óptico y acústico este papa suscita esperanza. Estoy convencido que incidirá en positivo adentro de la Iglesia y en el mundo. Es un pacificador".
Asimismo, destacó la elección del nombre León, "muy indicativa, en la tradición de San León Magno y de León III que en el 800 coronó a Carlomagno".
"Su experiencia, la capacidad de hablar muchas lenguas, el hecho de que haya sido un misionero pero que también haya trabajado en la curia durante dos años lo hacen un papa pastor y de gobierno. No viene de un solo ambiente y esto le permitirá hablar con todos", añadió.
"Si unimos los zapatos negros de Bergoglio a la claridad doctrinal cristalina de Ratzinger, sin buscar a toda costa originalidad, pienso que León XIV ofrecerá una buena combinación. Se podrá representar una síntesis de lo mejor de ambos", concluyó.