Con la economía de Argentina moviéndose hacia una recesión, los analistas intentan determinar si la presidenta Cristina Kirchner seguirá inclinándose por una política monetaria restrictiva con el fin de frenar la inflación galopante, o cambiar de nuevo hacia una expansión monetaria.

Así comienza el artículo que publica hoy The Wall Street Journal y que se hace eco de la información publicada en los medios locales que se afirma que “el ministro de Economía, Axel Kicilloff, defensor del crecimiento, y el cauteloso presidente del Banco Central, Juan Carlos Fábrega, están en conflicto sobre qué dirección tomar, el Gobierno dice que no hay tensión”.

El diario se refiere así, a la desmentida que realizó la semana pasada el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, sobre una presunta pelea entre ambos funcionarios.

Resume que Fábrega subió las tasas de interés para frenar la expansión de la oferta monetaria y enfriar una inflación galopante; que el gobierno informó un 1,8% de inflación en abril; y que el crecimiento fue “anémico” en lo que va del año ya que la economía en realidad se contrajo un 0,9% en marzo, según datos del gobierno.

Por último, el diario deja el interrogante: “queda por ver cuánto tiempo el gobierno seguirá sacrificando el crecimiento para la estabilidad monetaria”.