En la era digital, la seguridad personal y la protección de datos bancarios se han convertido en una prioridad. Sin embargo, un nuevo tipo de ciberataque está ganando terreno, poniendo en riesgo a los usuarios.
El modus operandi es tan sofisticado como engañoso: los ciberdelincuentes están utilizando aplicaciones de VPN (Redes Privadas Virtuales) falsas para infiltrarse en los teléfonos y robar información personal y financiera.
Tradicionalmente, las VPN son herramientas esenciales para la privacidad, ya que encriptan la conexión a internet y ocultan la dirección IP. No obstante, algunos desarrolladores maliciosos han aprovechado esta reputación para crear aplicaciones fraudulentas que, en lugar de proteger, exponen al usuario.
Cuáles son las aplicaciones falsas que roban datos y pueden vaciar cuentas bancarias
Expertos en ciberseguridad han lanzado una alerta global sobre estas aplicaciones que, una vez instaladas, actúan como puertas para el robo de datos sensibles.
La empresa de ciberseguridad Kaspersky ha sido una de las primeras en identificar y denunciar esta amenaza. Recientemente, la firma reveló que al menos seis aplicaciones de VPN, que se hacían pasar por servicios legítimos, estaban en realidad funcionando como intermediarios para que los delincuentes accedieran a los datos personales y a cuentas bancarias.
Las aplicaciones identificadas por Kaspersky son:
- MaskVPN
- DewVPN
- PaladinVPN
- ProxyGate
- ShieldVPN
- ShineVPN.
La peligrosidad de estas aplicaciones reside en su capacidad para transformar el dispositivo del usuario en un servidor proxy. De esta forma, cualquier dato que transite a través del teléfono, desde contraseñas hasta el historial bancario, puede ser fácilmente interceptado y robado por los ciberdelincuentes.
Cómo roban datos las aplicaciones
El mecanismo es tan sigiloso que las víctimas rara vez se dan cuenta de la intrusión. EstasVPN falsas simulan las funciones de encriptación y anonimato de sus contrapartes legítimas, haciendo que el usuario se sienta seguro. Sin embargo, en el trasfondo, la conexión que supuestamente lo protege está siendo utilizada para recopilar toda la información sensible, que luego es usada para realizar actividades ilícitas en su nombre.
Los criminales no solo pueden realizar compras fraudulentas y transferencias de dinero no autorizadas, sino que también pueden vender la información robada en mercados clandestinos. En muchos casos, el usuario solo se da cuenta del robo cuando empieza a notar movimientos extraños en sus cuentas o recibe notificaciones sobre transacciones que no realizó.
Más allá del robo de datos bancarios, estas aplicaciones maliciosas también pueden tener la capacidad de descargar e instalar otros tipos de malware en el dispositivo. Esto aumenta exponencialmente el riesgo, ya que el teléfono puede quedar completamente comprometido, permitiendo a los atacantes tomar el control total del mismo para cometer otros delitos cibernéticos.