Resultó que los informes sobre la muerte del Tea Party eran muy exagerados. Esta semana, Ted Cruz, un candidato hispano que cuenta con el respaldo de este movimiento conservador estadounidense, derrotó a un competidor del establishment del Partido Republicano en las elecciones en Texas para determinar quién será el candidato del partido para competir por una banca en el Senado de EE.UU.

Para Rand Paul, el senador por Kentucky que fue elegido en 2010 con el apoyo del Tea Party, el mensaje de las elecciones de Texas ha sido claro. El movimiento está vivo y bien. Lo de Ted Cruz fue una derrota enorme para el establishment, le dijo Paul al Financial Times.

Cuando el movimiento cobró fuerza en 2009, tras la victoria electoral del presidente Barack Obama a quien consideran un socialista el Tea Party se presentó públicamente como una agrupación indignada que busca reducir el tamaño y el poder del gobierno.

En las elecciones de 2010, Paul y otros candidatos respaldados por el Tea Party, como Marco Rubio, actual senador por Florida y Ron Johnson, senador por Wisconsin, resultaron elegidos, pero otros candidatos del movimiento no tuvieron éxito. Ese fue uno de los motivos por los cuales pareció que, en los últimos 18 meses, el Tea Party estaba en declinación. Ya no se vieron sus grandes concentraciones partidarias y sus miembros fueron acusados de llevar al gobierno estadounidense al borde del default por su intransigencia en las negociaciones por el techo de la deuda.

Además, no tiene un candidato propio en la carrera presidencial, ya que consideran demasiado moderado a Mitt Romney, el político que el Partido Republicano supuestamente consagrará en su convención.

Pero recientes triunfos electorales, como el de Cruz, han demostrado que el movimiento no sólo todavía está vivo sino que ha madurado, han dicho los analistas.

En 2010, el Tea Party presentó candidatos excéntricos como Christine ODonnell, una política inexperta que había practicado la brujería, y Sharron Angle, quien sugirió que los masajes podían ayudar a rehabilitar a los presos. Pero Cruz tiene otros antecedentes: es un graduado de Princeton y Harvard, trabajó con William Rehnquist, presidente de la Corte Suprema de EE.UU. y actuó como asesor legal de Texas.

Su victoria siguió a un golpe similar en Indiana, en mayo, cuando el Tea Party desplazó a Dick Lugar quien fue senador durante seis períodos de la candidatura republicana y lo reemplazó por Richard Mourdock, el tesorero del estado.

Eso no quiere decir que el Tea Party ganara todas las primarias, pero incluso cuando su candidato perdió, como en Utah, obligó al candidato del establishment a adoptar una línea más dura, con lo que empuja al partido más hacia la derecha.