

Con profundo pesar, el rey Felipe VI expresó sus condolencias por el fallecimiento del papa Francisco, ocurrido este lunes a los 88 años en la residencia vaticana de la Casa Santa Marta. A través de un telegrama oficial dirigido al cardenal Giovanni Battista, decano del Sacro Colegio Cardenalicio, el monarca destacó el papel central que tuvo el pontífice en promover el diálogo y el consenso como herramientas fundamentales para construir "un mundo más justo y solidario".
"Ante el dolor por su pérdida, la Reina y toda la Familia Real se unen a mí para trasladar a toda la Iglesia Católica nuestro pésame y nuestro afecto, así como nuestras oraciones por su descanso eterno", expresó el jefe del Estado en su mensaje. Las palabras reflejan el vínculo cercano que la monarquía española mantuvo con Francisco desde el inicio de su pontificado en 2013.
El papa, nacido Jorge Mario Bergoglio, será recordado por su cercanía con los más necesitados, su apuesta por una Iglesia abierta y su incansable impulso por la fraternidad social. En ese marco, la figura del pontífice también ocupó un lugar especial en la agenda diplomática y espiritual de la Corona española.

El legado del papa Francisco según Felipe VI
En su mensaje de despedida, Felipe VI subrayó que el pontífice argentino "ha dado testimonio a lo largo de su pontificado de la importancia que para el mundo de nuestro siglo tienen el amor al prójimo, la fraternidad y la amistad social". Estas palabras no solo trazan un perfil humano del papa, sino que también reflejan el impacto de su figura más allá del ámbito religioso.
"Nos seguirá inspirando siempre su convicción de la necesidad de llevar ánimo y consuelo a los más pobres y necesitados", agregó el monarca, destacando el compromiso pastoral del papa Francisco con los sectores más vulnerables.
Una relación cercana entre el Vaticano y la monarquía española
La relación entre la Casa Real española y el papa Francisco fue estrecha y sostenida desde el inicio de su pontificado. El primer viaje oficial al extranjero de los entonces nuevos reyes Felipe VI y doña Letizia fue precisamente al Vaticano, el 30 de junio de 2014. Allí fueron recibidos en audiencia por el papa, consolidando así un vínculo de cercanía institucional y personal.
Antes de ese encuentro, como príncipes de Asturias, Felipe y Letizia ya habían asistido en marzo de 2013 a la misa de inicio del pontificado de Francisco, en representación de los entonces reyes Juan Carlos I y doña Sofía. Años más tarde, el 27 de abril de 2014, el rey emérito y doña Sofía saludaron al papa tras la canonización de Juan XXIII y Juan Pablo II.
Incluso tras su primera visita oficial, la reina Letizia volvió a encontrarse con el pontífice en noviembre de 2014, durante un acto de la FAO en Roma. En otro gesto de continuidad, el papa saludó a doña Sofía en el funeral del papa emérito Benedicto XVI, en enero de 2023, demostrando una relación de respeto mutuo.













