La tensión entre Estados Unidos y China ha devuelto la volatilidad a los mercados europeos. El recrudecimiento de la guerra comercial y la amenaza de nuevos aranceles lanzada por Donald Trump contra la Unión Europea han provocado un retroceso en las principales bolsas del continente.
El Euro Stoxx 50 perdió un 1,81 %, con caídas más pronunciadas en Milán y París, afectando tanto al sector del lujo como a la industria manufacturera.
En este entorno incierto, el dólar pierde terreno frente al euro, una divisa que muestra signos de fortaleza impulsada por una caída mayor a la esperada de la inflación en Francia y una mejora inesperada en la confianza del consumidor estadounidense.
El euro se cambió por debajo de los 1,1350 dólares, mientras que el Banco Central Europeo (BCE) fijó el tipo de cambio de referencia en 1,1356 dólares. Estas fluctuaciones impulsan a muchos europeos a diversificar sus ahorros, a menudo en monedas extranjeras como el dólar.
A su vez, Christine Lagarde, presidenta del BCE, advirtió que "aumentar la importancia internacional del euro puede tener implicaciones positivas para la zona del euro". En este contexto, se vuelve cada vez más complejo mantener cuentas en dólares fuera del país sin cumplir con las exigencias fiscales.
La presión regulatoria no distingue monedas, y los bancos se ven obligados a colaborar activamente con las autoridades tributarias. El mensaje es claro: se acabó el anonimato financiero para quienes no cumplan con los requisitos establecidos por Hacienda.
¿Pueden cerrarte una cuenta bancaria en dólares sin previo aviso?
El auge de la cooperación fiscal internacional ha cambiado las reglas del juego para quienes mantienen cuentas bancarias en dólares fuera de su país de residencia. Desde la implementación del Common Reporting Standard (CRS), las entidades financieras comparten automáticamente la información de sus clientes con las autoridades tributarias.
Esto implica que los ahorristas europeos que no declaren correctamente sus ingresos o no justifiquen el origen de los fondos pueden ver cómo sus cuentas son cerradas sin previo aviso. "Los bancos están obligados a cumplir con normas internacionales de transparencia, y cualquier indicio de incumplimiento puede ser considerado un riesgo legal o reputacional", señalan fuentes financieras del sector bancario.
Las entidades financieras no solo pueden cerrar cuentas bancarias en dólares sin previo aviso, sino que también están facultadas a hacerlo si detectan alguna irregularidad. "La falta de documentación, la existencia de movimientos sospechosos o el incumplimiento de las normativas fiscales pueden ser motivos suficientes", explican desde el área de cumplimiento normativo de una entidad europea.
Esto se debe a la obligación de cumplir con las normativas internacionales contra el lavado de dinero y la evasión fiscal. En muchos casos, los bancos deben exigir documentación que justifique el origen lícito de los fondos y verificar que el titular cumple con sus obligaciones fiscales tanto en su país de residencia como en el país donde está radicada la cuenta.
¿Qué pasa si no declarás una cuenta en dólares?
No declarar una cuenta en dólares puede tener consecuencias graves. En países como España, los rendimientos generados por estas cuentas -intereses, dividendos o ganancias- deben incluirse en la declaración del Impuesto sobre laRenta de las Personas Físicas (IRPF).
Omitir esta información puede derivar en inspecciones fiscales, sanciones e incluso procesos judiciales. En particular, España exige que cualquier cuenta bancaria en el extranjero con un saldo superior a los 50.000 euros sea declarada mediante el Modelo 720. No hacerlo puede acarrear sanciones económicas importantes, incluso superiores al monto no declarado.
Además, la Agencia Tributaria puede considerar la no declaración como una señal de intención de ocultación, lo cual agrava la situación legal del contribuyente. Las sanciones pueden ser desproporcionadas, especialmente si se determina que hubo intención de defraudar al fisco.
Cómo evitar el cierre de tu cuenta en dólares
Para conservar una cuenta en dólares activa siendo ciudadano europeo, es indispensable cumplir con varios requisitos:
Declarar la cuenta en los formularios fiscales correspondientes (como el Modelo 720 en España).
Justificar el origen de los fondos con documentación adecuada.
Mantener actualizados los datos personales y fiscales ante la entidad financiera.
Colaborar activamente con los pedidos de información de los bancos.
Los expertos recomiendan contar con asesoramiento profesional. "En un entorno donde los controles bancarios son cada vez más estrictos, el consejo de un especialista tributario puede marcar la diferencia entre operar con tranquilidad o enfrentar sanciones graves", aseguran desde una firma de asesoría fiscal con sede en Madrid.
En tanto, Christine Lagarde insistió recientemente en que "la protección frente a sanciones y la volatilidad de los tipos de cambio pasa por una mayor presencia del euro en el comercio global". Para lograrlo, dijo, Europa necesita "mercados de capital más profundos y una base legal sólida".
Esta ambición por posicionar al euro como alternativa sólida al dólar coincide con el creciente escrutinio sobre las cuentas en divisas extranjeras. A medida que las economías buscan blindarse frente a la inestabilidad geopolítica, la transparencia financiera se convierte en una obligación y ya no en una elección.