El papa León XIV ha expresado en reiteradas ocasiones la necesidad urgente de vocaciones en la Iglesia Católica, enfatizando la importancia de atraer a jóvenes hacia el sacerdocio y la vida religiosa. Hizo un llamado a que se escuche y acoja a los jóvenes en su búsqueda de este camino.
Su llegada al Vaticano ha sido considerada "positiva y esperanzadora", recibiendo elogios tanto de la facción más conservadora de la iglesia como de los seguidores de Francisco.
En consonancia con su predecesor, su mensaje de paz y su firme compromiso con la justicia social y el diálogo han revitalizado la fe católica, siendo especialmente bien recibido por la juventud.
Tras su sorpresiva elección el pasado jueves como pontífice, Robert Prevost, quien a partir de ahora será conocido como papa León XIV, ha logrado ganarse la simpatía y el afecto de millones de fieles que previamente no lo conocían.
El mensaje del Papa León XIV en la tumba de San Pedro
"¡La Iglesia los necesita!", afirmó el papa, al referirse a la necesidad de fomentar más vocaciones religiosas. Subrayó la importancia de que "los jóvenes encuentren en nuestras comunidades un espacio de acogida, escucha y estímulo en su camino vocacional, así como la posibilidad de contar con modelos creíbles de entrega generosa a Dios y a sus hermanos".
"No temáis, aceptad la invitación de la Iglesia", exhortó el papa.
Leon XIV recuerda a los católicos el mensaje del Papa Francisco sobre las vocaciones
Leon XIV destacó que su primer domingo como Obispo de Roma coincide con el del Buen Pastor, el cuarto del tiempo de Pascua, un momento en el que el Evangelio recuerda cómo "Jesús se manifiesta como el verdadero Pastor, quien conoce, ama y entrega su vida por sus ovejas".
Desde hace 62 años, este domingo se conmemora la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones, razón por la cual León XIV enfatizó la necesidad de que la Iglesia cuente con un mayor número de vocaciones.
"Hagamos nuestra la invitación que el Papa Francisco nos dejó en su mensaje para esta Jornada, en el que nos instaba a acoger y acompañar a los jóvenes. Oremos al Padre celestial para ser, los unos para los otros, pastores "según su corazón", capaces de ayudarnos mutuamente a avanzar en el amor y en la verdad", añadió el papa.