Una nueva medida refuerza la movilidad de los adultos mayores y personas con discapacidad en la capital. La Tarjeta Azul amplía sus beneficios y simplifica el acceso al sistema.
Madrid se consolida como una de las ciudades con mayor compromiso en materia de inclusión social y movilidad. En el marco de un plan para mejorar la calidad de vida de los adultos mayores, pensionistas y personas con discapacidad.
El Ayuntamiento ofrece acceso ilimitado al transporte público mediante la Tarjeta Azul, una herramienta que permite viajar por la capital a un precio simbólico.
Este beneficio no solo representa un alivio económico para los colectivos más vulnerables, sino que también promueve su participación activa en la vida urbana.
La medida abarca el uso ilimitado de autobuses EMT, Metro en zona A y la línea ML1 del Metro Ligero. El objetivo es garantizar el derecho a la movilidad sin barreras y con condiciones adaptadas a cada situación.
¿Quiénes pueden acceder a la Tarjeta Azul y qué requisitos deben cumplir?
Para obtener la Tarjeta Azul es necesario estar empadronado en el municipio de Madrid y formar parte de alguno de los grupos contemplados por la normativa.
Entre ellos se incluyen personas mayores de 65 años, pensionistas por edad o discapacidad, y ciudadanos con una discapacidad igual o superior al 33%. También califican aquellos con incapacidad legal o dependencia reconocida, así como los cónyuges sin ingresos de beneficiarios.
El nivel de renta constituye otro criterio clave. En el caso de los mayores de 65 años, los ingresos no deben superar una vez el IPREM. Cada categoría tiene límites específicos que se evalúan al momento de la solicitud. Este filtro económico busca priorizar a quienes realmente necesitan el subsidio.
Los beneficiarios reciben una tarjeta válida por cinco años. Una vez transcurrido ese plazo, deben renovarla para acreditar que aún cumplen con las condiciones requeridas. Durante su vigencia, la tarjeta asegura una cobertura de transporte estable, segura y accesible.
¿Cómo se puede solicitar la Tarjeta Azul y qué documentación se necesita?
Existen dos formas para iniciar el trámite. La vía presencial requiere acudir a una Oficina de Atención a la Ciudadanía Línea Madrid. En este caso, la fotografía necesaria se toma directamente en la oficina y se recomienda pedir cita previa para reducir tiempos de espera.
Esta modalidad está disponible para todos los grupos habilitados.
La opción digital, por ahora, solo está disponible para personas mayores de 18 años con discapacidad. En este caso, el solicitante debe acceder al portal del Ayuntamiento de Madrid, completar el formulario y adjuntar una fotografía digital reciente. Ambas opciones permiten iniciar el proceso de manera sencilla.
En cuanto a la documentación, se exige una identificación oficial (DNI, NIE o tarjeta de residencia) y un certificado que acredite la condición específica: resolución de pensión, dictamen de discapacidad, sentencia de incapacidad o documentación similar.
La tarjeta se emite sin costo, pero requiere una carga mensual de 6,20 euros.
¿Cómo funciona la carga y el uso de la Tarjeta Azul?
La carga mensual puede realizarse en estancos autorizados, estaciones de Metro (zona A) y a través de la aplicación móvil Tarjeta Transporte Público. Una vez activada, cada carga tiene una validez de 30 días consecutivos a partir del primer uso.
Solo una tarjeta puede estar activa al mismo tiempo. Por lo tanto, si el usuario también posee una Tarjeta de Transporte Público convencional, debe elegir cuál desea activar. El cambio entre ambas no conlleva coste adicional, pero requiere una gestión presencial en las oficinas correspondientes.