De acuerdo con el Ministerio del Interior, la renovación del pasaporte puede iniciarse hasta un año antes de su vencimiento. Hacerlo en este plazo permite un trámite más ágil, sin necesidad de aportar documentación adicional. Sin embargo, si el pasaporte ya ha caducado y ha pasado un largo periodo sin renovarse, la situación cambia.
Renovar el pasaporte español no es algo que deba dejarse para el último momento. Aunque no existe una prohibición oficial directa por parte del Gobierno, las autoridades han fijado plazos clave que los ciudadanos deben respetar si quieren evitar complicaciones a la hora de renovar este documento esencial.
Quienes esperan demasiado para renovar pueden verse obligados a cumplir requisitos adicionales. En muchos casos, no se trata de una denegación formal, pero sí de un endurecimiento del proceso. Y esto puede afectar directamente a quienes necesiten el pasaporte de forma urgente para viajar al extranjero.
Renovar la clave a tiempo: evita problemas antes de que caduque
Tal como indica el portal citapreviadnie.es, la recomendación oficial es clara: iniciar el trámite de renovación en el último año de validez del pasaporte. Esta ventana de tiempo es suficiente para asegurar que el proceso se complete sin retrasos, incluso en épocas de alta demanda como el verano.
La Policía Nacional subraya en su guía que este consejo no es solo por conveniencia. Renovar dentro del plazo permite que el pasaporte se tramite como una continuación del anterior, sin que se requieran verificaciones adicionales de identidad. Eso significa menos trámites y menos riesgo de retrasos por problemas administrativos.
Además, renovar antes de que el documento expire permite conservarlo como identificación de respaldo. Aunque no tenga valor como documento de viaje una vez vencido, sigue siendo útil en otras gestiones mientras se espera la entrega del nuevo pasaporte.
Consecuencias de dejar pasar años sin renovar el pasaporte
Cuando una persona permite que transcurran varios años sin renovar su pasaporte, el proceso puede experimentar modificaciones significativas. En lugar de una simple renovación, se puede considerar como una primera expedición, lo que conlleva un control de identidad más riguroso.
Esto no implica que el ciudadano pierda su derecho a renovar, pero sí que deberá cumplir con trámites más complejos. Algunos usuarios han informado que incluso se les ha solicitado acreditar la nacionalidad española con documentación adicional si el pasaporte llevaba muchos años vencido y no contaban con un DNI reciente.
Por lo tanto, esperar demasiado no es recomendable. Además del riesgo de demoras, la renovación puede requerir más citas, tiempo y documentación. En particular, si se reside en el extranjero, las exigencias del consulado español pueden ser aún más estrictas.
Razones por las que se puede denegar la renovación
Si bien no renovar el pasaporte durante varios años no significa automáticamente que se denegará la solicitud, hay circunstancias específicas que pueden llevar a su rechazo. Una de las más relevantes es contar con una orden judicial que prohíba la salida del país. Esto puede suceder, por ejemplo, en situaciones de causas penales en curso o procesos de custodia con restricciones de movilidad.
La renovación también puede ser denegada si se registran extravíos o robos repetidos sin una justificación adecuada. En tales casos, las autoridades pueden sospechar de un uso fraudulento del documento, lo que resulta en la suspensión de su expedición hasta que se aclare la situación.
Estas circunstancias están contempladas en el Real Decreto 411/2014, que establece las normas para la emisión de pasaportes ordinarios en España. Por lo tanto, no solo el tiempo transcurrido, sino también el historial del solicitante, pueden afectar el resultado del trámite.
La solicitud para renovar el pasaporte se realiza de manera online a través del portal www.citapreviadnie.es. Este sistema permite seleccionar la comisaría más cercana y reservar una fecha y hora disponibles. Se aconseja hacer la gestión con anticipación, ya que en ciertos períodos, la disponibilidad puede agotarse con semanas de antelación.
La documentación necesaria para la renovación incluye el pasaporte anterior, una fotografía reciente y el DNI vigente. Además, es obligatorio abonar la tasa correspondiente, que en 2025 es de 30 euros. En caso de pérdida, será necesario presentar una denuncia previa.
El proceso suele tardar entre 5 y 10 días hábiles, aunque puede variar según la demanda. En situaciones urgentes, como viajes inminentes con justificante, algunas oficinas pueden emitir pasaportes exprés, aunque esto no es lo habitual.