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Las autoridades colombianas desmantelaron un "call center" de extorsión que funcionaba en la cárcel. En particular, era desde la unidad de La Picota, una de las principales cárceles de Bogotá.

Según las autoridades, desde el pabellón seis de La Picota los criminales hacían llamadas de "ciberextorsión" y suplantación de fiscales o integrantes de la Policía Nacional, entre otras modalidades de extorsión.

Así fue el operativo en La Picota contra el "call center" de estafas

"Realizamos una diligencia de allanamiento y registro en las celdas del pabellón número seis de este centro penitenciario, en el que hallamos 40 celulares, 15 cables USB, 30 cargadores, 60 SIM cards, 18 armas cortopunzantes, cinco libretos extorsivos, licor y estupefacientes", expresó el comandante de la Policía de Bogotá, brigadier general, Giovanni Cristancho, en un video.

Los miembros de este grupo de delincuentes "tendrían rentas criminales por más de 250 millones de pesos (unos 61.000 dólares) mensuales", expresó el oficial, que agregó que a quienes les hallaron los celulares les imputarán el delito de extorsión agravada. Cristancho señaló además que "de las 764 denuncias de extorsión recibidas este año" en Bogotá, el 45 % corresponde a llamadas hechas desde prisiones.

Capturan a 26 presuntos miembros de grupo criminal en el departamento colombiano del Chocó

Las autoridades colombianas capturaron a 26 personas en el departamento del Chocó, fronterizo con Panamá, por supuestamente pertenecer a una red criminal que obtuvo millonarias ganancias en múltiples robos, informó este martes la Policía.

Las detenciones se produjeron en Quibdó, la capital departamental, donde la Fiscalía y la Policía realizaron "19 órdenes de registro y allanamiento, logrando la captura de 26 integrantes" de la banda 'Los Mexicanos', detalló en redes sociales el director de la Policía colombiana, general Carlos Triana.

El alto oficial añadió que "en solo 80 casos de hurto" la red obtuvo 7.800 millones de pesos (unos 1,9 millones de dólares). Entre los capturados están dos presuntos cabecillas, quienes tienen un amplio prontuario criminal y supuestamente eran el principal azote de dos barrios de Quibdó.