Viajar hacia Estados Unidos implica cumplir con una serie de regulaciones estrictas sobre el equipaje de mano, establecidas tanto por las aerolíneas como por la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA).
Estas reglas buscan garantizar la seguridad a bordo y agilizar los controles en los aeropuertos estadounidenses. Por eso, determinan qué objetos pueden transportarse en la cabina, así como las dimensiones y, en algunos casos, el peso permitido del equipaje de mano. Conocer estas normas antes de viajar hacia Estados Unidos es clave para evitar demoras, cargos inesperados o la retención de pertenencias en los puntos de inspección.
Alerta aeropuerto: nadie puede entrar o salir de Estados Unidos sin superar esta prueba
La TSA suele recordar a los pasajeros que el equipaje de mano debe cumplir con restricciones de tamaño para poder ser ubicado en el compartimento superior o debajo del asiento delantero. La mayoría de las aerolíneas en Estados Unidos siguen estas dimensiones máximas aproximadas:
- Equipaje de mano: 56 x 36 x 23 cm (22 x 14 x 9 pulgadas)
- Artículo personal (mochila pequeña, cartera): 45 x 35 x 20 cm (18 x 14 x 8 pulgadas)
Más allá de estos parámetros generales, las autoridades recomiendan revisar las políticas específicas de cada aerolínea antes de volar.
Los viajeros que lleven estos artículos prohibidos en el equipaje de mano no podrán volar: ¿cuáles?
En Estados Unidos, la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA) establece una lista estricta de artículos que no pueden llevarse en el equipaje de mano por motivos de seguridad. Estos son algunos de los más importantes:
- Armas de fuego y municiones, incluso réplicas o juguetes que imiten armas reales.
- Objetos punzantes o cortantes, como cuchillos, navajas, tijeras grandes o herramientas afiladas.
- Sustancias inflamables, incluyendo encendedores con gasolina, aerosoles no aprobados y líquidos combustibles.
- Explosivos o materiales peligrosos, como fuegos artificiales, bengalas o cargas pirotécnicas.
- Sustancias químicas o tóxicas, como blanqueadores, sprays de defensa personal en grandes cantidades o productos corrosivos.
- Líquidos en envases de más de 100 ml, salvo excepciones como medicamentos o leche para bebés debidamente declarados.
Los agentes de seguridad pueden confiscar cualquier otro artículo que consideren riesgoso. Es por ello que los pasajeros deberían revisar las normas actualizadas de la TSA antes de viajar y empacar con responsabilidad.