Potaje marinero de pochas con langostinos y pan de ajo: sabor del mar en casa
El Potaje marinero de pochas con langostinos y pan de ajo es una receta que combina la frescura del mar con la suavidad de las legumbres. Su estilo es rústico y acogedor, ideal para compartir en una comida familiar o con amigos, donde cada bocado evoca el sabor del océano y la tradición culinaria. La mezcla de ingredientes frescos y el toque del pan de ajo aportan un carácter especial al plato.
El ambiente ideal para disfrutar de este potaje es en una mesa al aire libre, rodeado de naturaleza y buena compañía, donde el aroma del mar y la brisa suave complementen la experiencia. La preparación requiere aproximadamente 45 minutos y es de dificultad media, lo que permite a los cocineros disfrutar del proceso sin complicaciones excesivas.
¿Cómo preparar el Potaje marinero de pochas con langostinos y pan de ajo?
Para preparar el Potaje marinero de pochas con langostinos, comenzamos pelando los langostinos y reservando las colas. En una cazuela, rehogamos las cabezas y pieles de los langostinos en aceite a fuego alto durante un par de minutos. Luego, agregamos el vino y dejamos evaporar antes de incorporar agua, cocinando todo durante 15-20 minutos.
A continuación, picamos los pimientos y los rehogamos en otra cazuela con un fondo de aceite hasta que estén tiernos. Incorporamos el pimentón, la hoja de laurel y las pochas, removiendo bien. Luego, regamos con el caldo de marisco colado y cocemos durante 35-40 minutos, o hasta que las pochas estén tiernas.
Mientras tanto, picamos la cebolla y rallamos los dientes de ajo, pochándolos en una cazuela junto con cayena si se desea. Cuando estén tiernos, añadimos las colas de 5 langostinos y rehogamos a fuego fuerte. Agregamos los tomates rallados, trituramos la mezcla y la incorporamos a la cazuela con las pochas. Finalmente, añadimos los langostinos troceados, cocemos 5 minutos y servimos en platos hondos, decorando con las colas de langostinos enteras y perejil picado. Para acompañar, tostamos rebanadas de pan frotadas con ajo y pinceladas con aceite de oliva virgen extra en el horno a 180ºC durante 5 minutos.