Es el pueblo más encantador de España, está a 40 minutos de Alicante y tiene fuentes naturales salidas de un cuento

A los pies de la Sierra de Aitana, rodeado del sonido de fuentes naturales, molinos y acequias, se encuentra Sella, un pueblito alicantino que tiene menos de 600 habitantes, donde abundan las pozas de agua fresca y la vegetación. 

Sella es sinónimo de serenidad y naturaleza. Este municipio de la Comunidad Valenciana acoge un patrimonio arquitectónico, cultural y paisajístico que lo hace digno de visitar en todo momento del año.

¿Qué ver en Sella? 

Sella es un destino que te enamorará por completo. Una de las cualidades de este bonito pueblo es su clima privilegiado debido al aire fresco de la montaña y la abundante vegetación. Por este motivo, es un sitio ideal para recorrer a pie sus distintos senderos. 

Una de las opciones más recomendadas es la ruta del Agua. Se trata de un camino con baja dificultad que parte del casco urbano y desemboca en la Font del Pi, la de l'Alcàntera. Además, se pueden ver las antiguas acequias, los míticos molinos y los azudes.

Para los aficionados al turismo deportivo, ofrece experiencias en parapente y caminatas más intensas como el sendero del Arc o el de Xarquer-Castellets. También, hay espacios recreativos, como la de la Font Major, donde se puede acampar y realizar picnics diurnos. 

¿Qué comer en Sella?

Si haces una escapada por Sella debes probar alguno de sus platos típicos, como el arròs amb fesols i penques, la borra de melva o los fasedures. Además, hay bares que se especializan en croquetas de bacalao, un clásico de la Semana Santa que puedes conseguir durante todo el año. 

¿Cómo llegar a Sella desde Alicante?

Sella está situado a tan solo 43 minutos de la capital y la ruta más rápida para llegar es AP-7.