- Retraso en el plazo fiscal: consecuencias ante Hacienda
- Aceptación tácita de la herencia y sus implicaciones
- Cómo evitar la asunción de deudas en una herencia
- Ingresos no reclamados: los seguros de vida
- Demora en la liquidación del régimen económico matrimonial
- Acceso a información financiera del causante
- Conflictos entre herederos: cuándo acudir al juzgado
- Deducciones fiscales olvidadas en el proceso sucesorio
Abrir una herencia no es tarea sencilla. Entre el dolor por una pérdida y el laberinto de trámites administrativos, es habitual que ocurran errores que cuestan tiempo, dinero y derechos. Por ello, conocer las trampas más frecuentes puede marcar la diferencia en el proceso sucesorio.
En un vídeo publicado en el canal de YouTube de su bufete, el abogado Manuel Vilches, expone cuáles son los ocho fallos más habituales que cometen los herederos y que pueden derivar en sanciones o complicaciones judiciales.
Retraso en el plazo fiscal: consecuencias ante Hacienda
El error más grave es no presentar el impuesto de sucesiones dentro del plazo legal. Como advierte Vilches: "Tenemos seis meses desde el fallecimiento para tramitar el impuesto de sucesiones y cinco meses para solicitar la prórroga". El incumplimiento de este plazo puede acarrear multas elevadas, especialmente si existen bienes inmuebles implicados.
Este descuido se produce frecuentemente en contextos emocionales delicados. El duelo y la carga administrativa dificultan la gestión oportuna del trámite, lo que conlleva consecuencias económicas relevantes.
Aceptación tácita de la herencia y sus implicaciones
Uno de los errores comunes consiste en disponer de bienes o realizar gestiones patrimoniales antes de la aceptación formal de la herencia. Manuel Vilches señala que "hacer actos de administración o de disposición que impliquen la aceptación de la herencia... se puede entender que hemos aceptado".
Acciones como pagar deudas del fallecido o vender activos sin haber formalizado la aceptación pueden interpretarse legalmente como aceptación tácita, lo cual impide una posterior renuncia, incluso ante pasivos superiores a los activos heredados.
Cómo evitar la asunción de deudas en una herencia
La modalidad de herencia a beneficio de inventario permite aceptar los bienes heredados sin comprometer el patrimonio propio con posibles deudas. Este trámite debe realizarse dentro de los 30 días siguientes al fallecimiento o al conocimiento de la condición de heredero.
Ignorar esta opción dentro del plazo puede implicar la obligación de asumir deudas no deseadas, con consecuencias económicas significativas para el heredero.
Ingresos no reclamados: los seguros de vida
Los seguros de vida vinculados al fallecido pueden representar ingresos considerables que muchas veces no son reclamados por desconocimiento. Aunque las aseguradoras notifican a Hacienda, los beneficiarios pueden ignorar su derecho.
La falta de solicitud en tiempo y forma conlleva la pérdida de estos beneficios. Además, es esencial considerar correctamente su tratamiento fiscal desde el primer momento.
Demora en la liquidación del régimen económico matrimonial
En los casos en que el fallecido estaba casado en régimen de gananciales, resulta indispensable realizar la liquidación previa de dicha sociedad antes de proceder al reparto de la herencia.
Vilches advierte que "se espera a que fallezca el otro cónyuge para realizar la herencia... esto produce un problema que deriva en contenciosos judiciales".
La correcta delimitación de los bienes conyugales puede evitar conflictos posteriores y facilita un reparto sucesorio justo y legalmente válido.
Acceso a información financiera del causante
La normativa reconoce a los herederos el derecho a acceder a los movimientos bancarios del fallecido. Según Vilches, "Nuestra legislación reconoce el derecho de los herederos a conocer los movimientos del fallecido".
Solicitar esta información permite evaluar con precisión la situación patrimonial heredada y tomar decisiones informadas que minimicen riesgos y sorpresas negativas.
Conflictos entre herederos: cuándo acudir al juzgado
Los desacuerdos familiares durante el reparto de la herencia son frecuentes. Vilches advierte que "Si no hay acuerdo, es un error no acudir al juzgado...".
Retrasar una vía legal o notarial para resolver el conflicto puede prolongar los tiempos, aumentar los costes y deteriorar las relaciones familiares. La intervención judicial puede ser clave para una resolución efectiva.
Deducciones fiscales olvidadas en el proceso sucesorio
Existen gastos deducibles en la liquidación de la herencia que frecuentemente no se aplican: funerarios, médicos, notariales, entre otros. Su omisión puede implicar un pago tributario superior al necesario.
Documentar adecuadamente estos costes permite reducir la base imponible del impuesto de sucesiones y optimizar fiscalmente el proceso hereditario.