El ajuste en la planta estatal: un recorte que prometen masificar en la próxima etapa
En su campaña rumbo a la presidencia, Javier Milei había prometido que la reducción del Estado no solo comprendería la desburocratización a través de una flexibilización de las normas sino también la eliminación de las y los trabajadores que conforman sus engranajes. Ya en el poder fue más allá: puso un número y lo alcanzó.
Acorde al informe mensual del INDEC sobre la evolución en la dotación de personal del Sector Público Nacional, se recortaron un total de 54.176 puestos de trabajo en los diferentes sectores que conforman la estructura del Estado Nacional entre noviembre de 2023 y junio de 2025. Esto incluye la administración centralizada, la descentralizada, la desconcentrada, las empresas públicas y sociedades del Estado a la par del resto de los llamados entes públicos. Representa una poda del 15,9% en el total de la planta del Estado.
El grueso de las desvinculaciones hasta la sanción de la Ley Bases se focalizó en la discontinuidad de los llamados contratos transitorios, renovados de manera anual, en oposición a los trabajadores de planta permanente. Los acuerdos laborales se volvieron trimestrales en 2024 y semestrales en 2025.
También apostó a un ajuste de la planta estatal reduciendo los ingresos con la postergación de paritarias y porcentajes por debajo del nivel inflacionario. Los últimos datos publicados por INDEC muestran una caída del poder adquisitivo en el período paritario 2024-2025 del 15,8%.
Si se considera desde diciembre de 2023, ATE estipula una pérdida acumulada del 35,9%.
El primer ajuste fuerte en la estructura del Estado Nacional la aplicó el propio Gobierno cuando achicó el número de ministerios de los 21 que existían en la presidencia de Alberto Fernández -incluyendo la Jefatura de Gabinete- a los diez del equipo libertario. La salida de Guillermo Ferraro significó la disolución de su cartera, Infraestructura, en febrero de 2024, así como el ascenso de Guillermo Francos al ministerio coordinador en mayo implicó el fin de Interior.
Por su parte, Federico Sturzenegger asumió en julio de 2024 al mando del ministerio más pequeño en dotación pero más incisivo a la hora de encaminar los recortes, Desregulación y Transformación del Estado. Así y todo también achicó su personal original de forma sistemática como hicieron el resto de las carteras en el transcurso de los primeros 19 meses de gestión.
Si bien la Ley Bases le dio las facultades delegadas al Ejecutivo durante el transcurso de un año para avanzar con una reforma integral de la administración pública, la política de transformación y reducción del Estado promete seguir adelante. La primera etapa que culminó el 8 de julio se caracterizó por la disolución, fusión y mudanza de organismos e institutos de la órbita desconcentrada y descentralizada -con mayor nivel de autonomía y autarquía- para encorsetarlos bajo la órbita de ministerios y el área presidencial.
De cara a la próxima etapa, donde el foco estará puesto en el sector de las empresas y sociedades del Estado, también será clave el capítulo relativo a Empleo Público en la mega norma que creó un Fondo de Disponibilidad donde poder agrupar a las y los estatales hasta tanto son reubicados o quedan libres al cabo de un plazo de tiempo proporcional a su antigüedad en el Estado. A través de las directivas concentradas en la Ley Bases y los decretos presidenciales se avanzó ya con la transformación del grueso de las empresas en Sociedad Anónimas, la desarticulación en unidades de negocio y sentar los pilares para su futura concesión o venta.
El achique del plantel de trabajadores en este sector promete profundizarse antes de que se concrete su paso a manos privadas.




