El Ministerio de Defensa ha lanzado uno de sus programas de modernización más ambiciosos en años: la compra de 214 obuses autopropulsados -86 sobre ruedas y 128 sobre cadenas- que serán destinados al Ejército de Tierra y a la Infantería de Marina.
Esta inversión estratégica, que alcanza los 3000 millones de euros, busca reemplazar los actuales obuses M109 A5 y dotar a las Fuerzas Armadas de un sistema de artillería más preciso, móvil y letal.
La operación forma parte del Programa Especial de Modernización, enmarcado en el Plan Industrial y Tecnológico para la Seguridad y la Defensa que el Gobierno presentó en abril. Dicho plan busca alcanzar el 2% del PIB en gasto en defensa e incluye una inyección adicional de 10.471 millones de euros para reforzar las capacidades militares del país.
La financiación de este programa correrá a cargo del Ministerio de Industria, que ha publicado el proyecto de Real Decreto para regular la concesión directa de préstamos destinados a estos sistemas. En concreto, se asignarán 1181 millones para el obús sobre ruedas y 1821 millones para el de cadenas.
Obuses sobre ruedas: alta movilidad y fuego de precisión
El subprograma ATP Ruedas contempla la compra de 86 obuses autopropulsados montados sobre chasis 8x8 o 10x10, acompañados de 86 vehículos de municionamiento, 14 vehículos de recuperación y siete vehículos de mantenimiento específico.
Este sistema estará completamente integrado en redes de mando y control, con capacidad para ejecutar fuegos en red y ataques de precisión contra objetivos navales en movimiento.
Además del armamento principal, este subprograma incluye simuladores adaptados, sistemas de tiro reducido y equipamiento de limpieza de tubos, lo que permitirá una formación avanzada y mantenimiento técnico a largo plazo. El objetivo es dotar a la artillería de un alto grado de automatización y conectividad, en línea con las exigencias del combate moderno.
Obuses sobre cadenas: potencia y resistencia para cualquier terreno
El subprograma ATP Cadenas supondrá la adquisición de 128 obuses sobre plataformas robustas de cadenas, aptas para operaciones terrestres y anfibias. Se incorporarán además 128 vehículos de municionamiento, 21 de recuperación y 59 de mando y control (48 para el Ejército de Tierra y 11 para la Armada). Esta flota se complementará con unidades para mantenimiento, instrucción y logística.
El diseño se basa en la barcaza ASCOD de GDELS-Santa Bárbara Sistemas, compatible con el programa VAC (Vehículo de Apoyo de Cadenas). Se espera que los nuevos obuses permitan operar más cerca del frente o incluso desde el mar, apoyando operaciones de desembarco con una protección elevada y gran capacidad de maniobra.
Nemesis y Piranha: los candidatos con sello europeo
Aunque el Ministerio no ha confirmado los modelos elegidos, todo indica que los favoritos son los desarrollados por General Dynamics European Land Systems (GDELS) y su socio KNDS. En la pasada edición de Feindef 2025, se presentó el Nemesis, un obús autopropulsado sobre cadenas con cañón de 155 mm / L52 totalmente automatizado.
Según el fabricante, "puede operar completamente sin tripulación, siendo el primer sistema obús autopropulsado (ATP) de cadenas que puede actuar completamente de forma remota". El vehículo está dotado con un motor diésel de 1.100 CV, navegación de alta precisión y azimut de 360°, lo que le permite disparar en cualquier dirección.
Para los sistemas sobre ruedas, GDELS ofrece el Piranha AAC 10x10, una plataforma de alta movilidad y protección compatible con las exigencias del programa español. Ambos modelos se fabricarán íntegramente en Europa, y se prevé que gran parte de su producción se concentre en las plantas de Santa Bárbara Sistemas en Trubia (Asturias) y Alcalá de Guadaira (Sevilla).
Impacto industrial y autonomía estratégica
Uno de los objetivos clave del plan es fortalecer la base industrial de defensa nacional. Se espera que el programa genere empleo cualificado en distintas regiones de España, y que tanto la fabricación como el mantenimiento completo de estos sistemas se realicen dentro del país.
Esto contribuirá directamente a mejorar la autonomía estratégica del Estado y su capacidad para mantener su operatividad sin depender de terceros.
En términos tecnológicos, los nuevos obuses se integrarán con sistemas C4ISR (Comando, Control, Comunicaciones, Computadoras, Inteligencia, Vigilancia y Reconocimiento) que permitirán decisiones en tiempo real y conexión con sensores externos.
También se incluirán cursos de formación, simuladores y medios de enseñanza, además de una planificación logística escalonada y sostenida a lo largo de los próximos años.
Con este salto cualitativo, el Ejército de Tierra y la Infantería de Marina dispondrán de una artillería de campaña más precisa, móvil, automatizada y con alcance extendido superior a los 40 kilómetros. Los nuevos sistemas estarán preparados para operar con municiones guiadas de nueva generación y responderán con rapidez en escenarios de alta intensidad.