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El Ministerio de Hacienda y Crédito Público de Colombia presentó un borrador de decreto que busca aplicar una retención en la fuente del 1,5% a las transacciones hechas mediante billeteras digitales como Nequi, Daviplata o Bre-B.

Esta medida se aplicará cuando el dinero transferido constituya un ingreso tributario para el receptor, es decir, cuando corresponda al pago de bienes o servicios.

El objetivo de la iniciativa es equiparar el tratamiento tributario entre las operaciones electrónicas y las compras realizadas con tarjetas débito o crédito. Sin embargo, la medida no aplicaría para transferencias personales sin contraprestación económica ni para quienes no sean responsables del IVA.

Cuánto se pagará por transferir $1 millón de pesos

De aprobarse la medida, una persona que realice una transferencia de $1.000.000 a través de Nequi o Daviplata y que corresponda a un ingreso tributario, deberá pagar una retención del 1,5%. Esto equivale a $15.000, por lo que el monto neto recibido sería de $985.000.

En el caso de una transferencia de $2.000.000, el descuento sería de $30.000. Dejaría un abono final de $1.970.000.

En qué casos no aplica la retención del 1,5%

El impuesto no aplicará en transferencias entre particulares que no tengan fines comerciales, ni cuando el receptor sea una persona natural no responsable del IVA o cuando el dinero no constituya ingreso gravable. En esos casos, los usuarios podrán seguir enviando dinero sin ningún tipo de descuento automático.

El borrador del decreto aún se encuentra en etapa de discusión, pero su eventual aprobación podría modificar la forma en que millones de colombianos usan los medios de pago digitales. Según datos de Colombia Fintech, en 2023 había más de 54 millones de usuarios únicos de billeteras digitales, lo que convierte a este sector en un pilar de la inclusión financiera.

Qué efectos podría tener el nuevo impuesto

Expertos y gremios del sector fintech advierten que la retención del 1,5% podría desincentivar el uso de plataformas digitales y promover el regreso al efectivo.

Sin embargo, el Gobierno sostiene que busca mejorar la trazabilidad de los pagos y fortalecer la recaudación tributaria sin afectar las operaciones personales.