Al menos dos miembros del Estado Mayor Central (EMC), la principal disidencia de las extintas FARC, murieron en un enfrentamiento con el Ejército Nacional en el departamento de Nariño, al suroeste de Colombia.
El hecho ocurrió en el municipio de Santa Bárbara de Iscuandé y fue confirmado por fuentes castrenses este viernes 27 de junio de 2025.
De acuerdo con el comunicado oficial del Ejército, la operación fue resultado de un trabajo previo de inteligencia que permitió ubicar a un grupo armado perteneciente al frente Iván Ríos del EMC, que operaba en la zona intimidando a la población civil.
Enfrentamiento en Santa Bárbara de Iscuandé dejó bajas en las disidencias de las FARC
La acción militar tuvo lugar en una zona rural del municipio de Santa Bárbara de Iscuandé. Según el reporte oficial, los dos disidentes muertos presuntamente estaban implicados en actividades de extorsión, amenazas y ataques contra la comunidad, lo que llevó a planear y ejecutar una operación para neutralizar su presencia.
"Tras un minucioso trabajo de inteligencia que permitió identificar la presencia de sujetos armados que intimidaban y amedrentaban a la población civil, se planeó y ejecutó una operación militar con el fin de neutralizar esta amenaza", señaló el Ejército en un comunicado difundido a los medios.
Durante el operativo, también fueron incautadas tres armas largas de asalto, una mira telescópica, tres proveedores y 62 cartuchos de diferentes calibres.
La facción Iván Ríos del EMC, en medio del conflicto entre disidencias
El grupo armado al que pertenecían los disidentes abatidos hace parte de la estructura Iván Ríos, una facción del EMC que ha mantenido una posición contraria al diálogo con el Gobierno colombiano. Esta disidencia opera principalmente en el suroccidente del país, con presencia activa en zonas fronterizas como Nariño.
Desde agosto de 2024, el EMC atraviesa una división interna. Por un lado, se encuentra el grupo liderado por Néstor Gregorio Vera Fernández, alias Iván Mordisco, que mantiene una postura beligerante. Por otro, la facción encabezada por Alexander Díaz, alias Calarcá Córdoba, continúa participando en los diálogos de paz con el Ejecutivo.
En enero pasado, la Defensoría del Pueblo emitió una alerta temprana sobre el riesgo que enfrentan comunidades en al menos siete departamentos del país por las acciones del EMC. La situación en Nariño se considera especialmente delicada debido a la presencia de grupos armados que buscan controlar rutas estratégicas para el narcotráfico y la extorsión.