Durante una conferencia en París, Elon Musk volvió a desafiar las ideas tradicionales sobre el futuro del empleo. Ante una audiencia internacional, el fundador de Tesla y SpaceX sostuvo que la inteligencia artificial avanzará hasta un punto en que los seres humanos dejarán de trabajar... pero no por eso quedarán desamparados. Su propuesta: un sistema de ingreso universal alto que garantice la supervivencia material en un mundo gobernado por máquinas.
La frase fue tajante: "Probablemente ninguno de nosotros tenga un trabajo. Pero igual van a poder comer". Según Musk, la tecnología hará innecesaria la intervención humana en la producción de bienes y servicios. Y frente a ese cambio, plantea un nuevo modelo económico.
Elon Musk propone automatización total e ingreso garantizado
Las declaraciones fueron realizadas en el evento VivaTech 2024, uno de los foros de innovación más importantes de Europa. Musk planteó que en un "escenario benigno" el trabajo dejará de ser una obligación para la supervivencia, porque la IA podrá hacerse cargo de toda la cadena productiva.
Frente a ese panorama, propuso implementar un ingreso universal alto, una transferencia monetaria suficiente para que cada persona pueda vivir sin necesidad de tener un empleo. A diferencia de la renta básica tradicional, esta sería una asignación más generosa, pensada para sostener un estilo de vida digno en un contexto de automatización generalizada.
"La cuestión será si la IA es benigna, y qué sentido tendrá la vida", agregó Musk.
Qué es el ingreso universal alto y qué desafíos presenta
El concepto de universal basic income (UBI) no es nuevo, pero Musk propone una versión más ambiciosa: un ingreso mensual para todos, sin condiciones, y suficientemente alto como para reemplazar el salario. El modelo pretende ser una solución estructural en un mundo donde el trabajo humano ya no es necesario para generar riqueza.
El debate está abierto. ¿Quién lo financiaría? ¿Los Estados mediante impuestos a las grandes tecnológicas? ¿Las propias empresas que se beneficien de la automatización? Hasta ahora, los experimentos piloto -como el de Finlandia entre 2017 y 2019- han mostrado mejoras en salud mental y estabilidad financiera, pero no ofrecen una fórmula clara para escalarlo globalmente.
¿El fin del trabajo o una nueva era laboral?
La visión de Musk no es aislada. Otros referentes como Sam Altman (OpenAI), Jack Dorsey (Twitter) o el investigador Geoffrey Hinton han advertido que la automatización puede eliminar millones de empleos. Sin embargo, economistas como Daron Acemoglu, del MIT, sostienen que la tecnología transforma más que destruye: el empleo podría cambiar, no desaparecer.
Mientras tanto, sectores como salud, educación o cuidado seguirán requiriendo intervención humana. La discusión no es solo económica, sino también política: ¿quién decide cómo se distribuyen los beneficios de la IA?