Las series sobre asesinos seriales se han convertido en un verdadero fenómeno cultural a nivel mundial. Plataformas como Netflix, Prime Video y HBO estrenan constantemente producciones basadas en crímenes reales o ficciones inspiradas en ellos, que millones de personas consumen como parte de su entretenimiento cotidiano.
En este contexto, la psicología explica que la atracción por estos contenidos puede tener múltiples causas. Algunas surgen de la curiosidad por lo extremo, otras del deseo de comprender el peligro, y en muchos casos, de la necesidad de experimentar emociones intensas en un entorno seguro y controlado.
Síguenos y léenos en Google Discover
Tanto en Colombia como en el resto del mundo, el auge del true crime, ya sea en documentales, podcasts o series, ha potenciado este interés. Para muchos, estas historias funcionan como rompecabezas: les permiten poner a prueba su capacidad de análisis y sentir una sensación de dominio frente al caos.
¿Es normal obsesionarse con asesinos? Lo responde la psicología
Según un informe publicado en Research Gate, ver solo series de asesinos seriales no implica un trastorno mental. La evidencia científica indica que esta preferencia suele tratarse de una combinación de curiosidad mórbida, búsqueda de emoción y educación sobre riesgo.
En estudios se observa que muchas personas se sienten seguras consumiendo violencia en un entorno mediático controlado, eso les ayuda a reducir la ansiedad y aumentar la sensación de dominio sobre lo desconocido.
Además, las plataformas alimentan esa preferencia con algoritmos que recomiendan más contenido similar, y así se refuerza el hábito. Cuando el consumo reemplaza otras actividades o afecta el sueño, las relaciones o la empatía hacia las víctimas, entonces sí puede volverse problemático.
¿Qué funciones cumple este consumo para el espectador?
Para muchos espectadores, el consumo de este tipo de contenido combina entretenimiento y aprendizaje. A través de las historias de asesinos seriales, se busca entender los modus operandi, los errores en las investigaciones policiales o los factores sociales que pueden explicar la aparición de comportamientos violentos.
En cierto modo, estas series permiten explorar lo prohibido desde una distancia segura, lo que genera una sensación de control sobre los miedos más profundos.
Cómo cuidar su consumo sin perder interés
Si le atraen estas producciones, los expertos recomiendan establecer límites claros. Evitar la sobreexposición es clave, ya que mirar este tipo de contenido antes de dormir puede aumentar la ansiedad o afectar la calidad del descanso.
También se aconseja variar los temas, alternando con series o películas de otros géneros para mantener el equilibrio emocional.