

Hay muchísimas formas de adelgazar los brazos. Sin embargo, hay un asombroso ejercicio que se destaca por el resto debido a que permite quemar y eliminar la grasa de la zona de forma sencilla, y en tan solo tres días.
El ejercicio debe estar acompañado de una alimentación balanceada y saludable, cuya dieta incluya pechuga de pollo, pescado, claras de huevo, tofu, frutas, verduras, legumbres, arroz integral, aceite de oliva y pan integral, entre otros. A esto conviene, además, sumar una buena hidratación, constancia y disciplina.

Todo debe estar supervisado por especialistas, como médicos y/o nutricionistas, entre otros.
El asombroso ejercicio para adelgazar los brazos en 3 días
Existe un conjunto de tres ejercicios que promete adelgazar los brazos en 3 días.
Enfocados en esa área del cuerpo, el primero consiste en realizar la plancha, con el fin de fortalecer los músculos del core y estabilizar los brazos. Los especialistas aconsejan hacer 3 series de 30-60 segundos.

Luego deberás hacer elevaciones laterales con mancuernas: 3 series de 12-15 repeticiones. En caso de que no tengas el objeto, puedes reemplazarlo con botellas de agua del tamaño adecuado para tus manos, bolsas de arroz o libros gruesos.
Por último, haz flexiones de brazos (push-ups), específicamente, 3 series de 10-15 repeticiones. Si bien es un ejercicio básico, resulta ser muy completo. Sin contar que se puede realizar en cualquier lugar y sin necesidad de equipo adicional.
Recuerda calentar antes de comenzar cada ejercicio y estirar al finalizar para evitar lesiones.

10 alimentos que debes evitar para adelgazar los brazos
El ejercicio y la dieta saludable son esenciales para lograr tus objetivos personales y físicos.
Así como hay alimentos que debes si o si incorporar a tu dieta, también hay otros que debes evitar a toda costa, debido a que no eliminan ni queman la grasa muscular de los brazos.
Estos son los 10 alimentos que debes evitar para adelgazar los brazos:
- Alimentos procesados y ultraprocesados, como papas fritas, galletas, pasteles, comidas congeladas y alimentos envasados.
- Bebidas azucaradas, como refrescos, jugos de frutas comerciales y bebidas energéticas.
- Alcohol.
- Alimentos fritos y grasosos, como pollo frito y alimentos rebozados.
- Productos de panadería y repostería, como muffins y donas.
- Carnes procesadas, como salchichas, tocino, jamón y embutidos.
- Snacks poco saludables, como palomitas de maíz con mucho aceite y dulces con alto contenido de azúcar.
- Productos lácteos enteros, como la leche entera, el queso y el yogur entero.
- Salsas y aderezos cremosos, como la mayonesa, la crema agria y el aderezo ranch.
- Bocadillos y comidas rápidas.




