

Las automotrices vienen sintiendo malestar con el mercado argentino. El año pasado varios ejecutivos regionales que estuvieron presentes en el Salón del Automóvil de Buenos Aires ya habían manifestado que la producción local tenía problemas de costos que afectaban la competitividad.
Hace pocos días volvieron a aparecer las críticas. Esa vez fueron ejecutivos de Ford quienes se mostraron disconformes con los controles sobre los vehículos importados además de advertir un creciente riesgo en el país. Pero no fue Ford la única terminal que mostró su malestar por cómo se está comportando la economía del país.
Ayer, un alto ejecutivo de General Motors (GM), la otra gran automotriz estadounidense, se sumó a las críticas expresando preocupación por la situación en Sudamérica y asegurando que el riesgo en la región ha aumentado de forma significativa en las últimas semanas por las situaciones de Venezuela y Argentina.
Así lo dijo el Vicepresidente Ejecutivo y Director Financiero de GM, Chuck Stevens, durante una conferencia telefónica con analistas financieros. En ese marco, aseguró que el perfil de riesgo en Sudamérica en las últimas semanas ha aumentado de forma significativa.
No vemos el horizonte y una resolución a las operaciones de negocios en Venezuela. Y al mismo tiempo Argentina aparece mucho más frágil añadió el ejecutivo, según reproduce cable de la agencia Efe.
Además, agregó que en este contexto, la automotriz prevé que los resultados en la región durante el primer trimestre de este año sean más débiles debido principalmente a la reducida producción en Venezuela.
En este marco, Stevens también se refirió al efecto negativo que la compañía empieza a ver con el debilitamiento de las economías emergentes. El perfil de riesgo ha aumentado en Sudamérica, explicó al referirse también a la depreciación de las divisas de las economías emergentes en las últimas semanas.
Consultados por El Cronista, en las oficinas locales de la automotriz prefirieron no hacer comentarios al respecto.
Stevens hizo estas afirmaciones durante la presentación de los resultados financieros de 2013 de la automotriz que, aunque mostró una ganancia de u$s 3.770 millones, la cifra fue 22% menos que en 2012. En la región los beneficios antes de intereses e impuestos se redujeron 28 %, a u$s 327 millones.
Las terminales estadounidenses parecen haber tomado la delantera en las críticas a la situación argentina. También en su presentación financiera, Ford dijo que la devaluación del peso se está acelerando y el Gobierno recientemente emitió controles sobre vehículos importados. Mediante un comunicado en el que se hacía referencia a la devaluación, advirtió sobre un creciente riesgo en el país. Y dentro de la región, también se enfocó especialmente en la situación de Venezuela por su volatilidad. Este reporte refleja mejora de la rentabilidad en Brasil y Argentina, compensado por el deterioro de Venezuela, incluyendo bajos niveles de producción, continúa.













