Por cómo están dadas las cosas en el rugby internacional, dejar de analizarse desde adentro o de analizar a equipos y jugadores rivales, es ceder terreno. Todos los seleccionados tienen analistas de video, o, mejor dicho, analistas de rendimiento, como sostiene Santiago Cuenya, Director de Sportstec Hudl en Latinoamérica, empresa que trabaja con rugby, fútbol, básquet, hockey sobre césped, hockey sobre hielo y vóley, entre otros deportes.”Se analizan jugadas y momentos, etapas del partido, pero no se editan videos”, indica Cuenya, ex jugador de Buenos Aires. Por ahí va el rugby en todos sus niveles, desde los seleccionados que participan de la Copa del Mundo hasta algunos clubes del ascenso de la URBA.
Sportstec Hudl ofrece dos productos: Sportscode Game Breaker, que es el que se usa en los equipos del rugby de Buenos Aires, por ejemplo, y Sportscode Elite, que tiene más prestaciones y está preparado para “sacar más datos y estar conectado con el Ipad en tiempo real”, explica Cuenya. El segundo es el implementado por los seleccionados nacionales.
Tal es la innovación y el detalle al que llegan estas herramientas que sirven para analizar todo tipo de situación de juego y para realizar un estudio individual y colectivo. Por todos esos detalles que se pueden analizar con estos productos, también es posible estudiar y corregir movimientos de categorías muy bajas como M-9 o M-12. Sí, rugby infantil.
¿Cómo surgió todo esto? Fue en Australia, donde se juntaron ingenieros para mejorar a los equipos deportivos de ese país de cara a su participación en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000. Después, la siguió el básquet junto con el fútbol australiano, dos deportes que lideraron los avances en cuanto a análisis de rendimiento. A medida que fue evolucionando la tecnología, se extendió al resto de los deportes.
Los productos de Sportstec Hudl se obtienen a través de licencias anuales, van desde los u$s 1.500, son exclusivos para equipos Mac y cada licencia sirve para tres máquinas, usándose de a una por vez.
¿Cómo se realiza el análisis de rendimiento? A nivel individual, cada jugador ve sus acciones individuales, o las de sus rivales, en un iPad, y el gran beneficio de esto es que lo puede hacer en su tiempo libre, en el baño o desayunando, por ejemplo. Al respecto, Cuenya recuerda que “a Manuel Contepomi (hoy entrenador de Newman) en el 2007 le gustaba mirar todo lo que hacía el contrario, quería anticiparse”.
Asímismo, se realizan charlas grupales, ya sea para analizar al equipo propio o al rival. “Deben ser concisas y al punto, no ambiguas”, explica Cuenya. Estas reuniones duran entre 7 y 10 minutos. Lo más común a la hora de estudiar los movimientos del próximo rival es tener esa charla en conjunto y después realizar una práctica grupal, para aclimatarse a lo que será el enfrentamiento. Por ende, no se puede fijar un promedio de cuánto tiempo se le da a esta actividad. “Depende de la situación del torneo, del entrenador, de los jugadores y de la relación del entrenador con los jugadores. No hay una sola manera”, afirma Cuenya. Las charlas son variables.
Tan productiva es esta tarea que muchos clubes del ascenso de la URBA invierten tiempo en ella. El Retiro, del Grupo III, es uno de ellos. Luciano Martino, el encargado del análisis de sus partidos, dice que “lo que lleva más tiempo es hilar bien fino, buscar corregir detalles y hacer bien lo básico. Se sabe que está todo inventando, el objetivo es mejorar cosas mínimas”.
A su vez, hay otra empresa internacional, Opta, que es contratada por las uniones nacionales para obtener videos editados con las acciones que quieren ver de sus jugadores, y también con los movimientos de los seleccionados rivales.
Tan productiva es esta tarea que los analistas de muchos equipos usan drones para filmar entrenamientos y cámaras IP, que se pueden instalar fijas en estadios o campos de entrenamiento. Ellos manejan esos equipos de manera remota y pueden realizar el análisis en simultáneo al desarrollo de la propia acción.
El análisis de rendimiento es una tarea que está en constante avance. Por eso, Cuenya indica: “Nos tomamos la capacitación muy seriamente, cuanto mejor usen los productos más nos va a servir a nosotros, porque más ideas van a surgir”.
