El grupo Alfaparf Milano hará una inversión de u$s 1,4 millones en el país para ampliar la producción para el mercado interno y de exportación. La empresa de cosmética capilar italiana usará el capital para adquirir equipamiento y sustituir importaciones en su planta del Centro Industrial de Garín, provincia de Buenos Aires, y capacitar personal.

"En el segmento profesional, ya somos fuertes con la elaboración de color. Sumamos productos de hair care. Y en las líneas orientadas al consumo doméstico, incorporamos una máquina para producir un kit que incluye dentro de la misma caja a la tintura y el oxidante", destacó Cesar Cantero, CEO de Alfaparf Milano en la Argentina, y agregó: "Dos factores aceleraron la decisión: las trabas para importar productos terminados y la dificultad de girar divisas al exterior".

Así, la compañía originaria de Milán producirá en el país productos para profesionales y el público en general, como tinturas, champús, cremas de enjuague y tratamientos como máscaras y aceites. Además de venderse en la Argentina, se enviarán a destinos de la región a los que ya exporta, como Perú, Paraguay, Ecuador, Guatemala y Costa Rica. "Estamos en una pulseada con Brasil por ganar el mercado saudí", confesó el CEO.

El anuncio se enmarca en el décimo aniversario de la puesta en marcha de la planta bonaerense, que en 2013 demandó un desembolso de u$s 6millones para la construcción de 7500 metros cuadrados y fue la fábrica más moderna de productos de belleza en la Argentina. A la fecha, lleva producidas más de 7,7 millones de unidadesanuales que antes se traían de Brasil e Italia.

La firma -que está presente en el país desde 1994- ejecutó una inversión de 1 millón de euros el año pasadopara adquirir maquinaria como parte de este plan que delineó para sustituir importaciones con, el objetivo de saltear al cepo e incrementar la producción local para proveer al mercado interno y generar ingresos en dólares a partir de las ventas en el exterior.

Alfaparf Milano potenciará la fabricación local de productos para profesionales y de consumo masivo para el público general.
Alfaparf Milano potenciará la fabricación local de productos para profesionales y de consumo masivo para el público general.

Con esta estrategia, la empresa -que en la Argentina emplea a más de 150 trabajadores entre las áreas de operación, laboratorio y planta- subió un 50% la producción y un 25% las exportaciones en lo que va de 2023, por lo que su facturación aumentó un 130% en el primer semestre.

"La proyección es concluir el año con valores récord de crecimiento en el volumen de productos fabricados localmente y las cantidades exportadas, lo que redundaría en un aumento de la facturación. El desarrollo es continuo",destacó Cantero.

El ejecutivo conoce bien el negocio latinoamericano del cuidado del cabello. Actual director general de la empresa en el país, fue el formador de toda la fuerza de venta desde Miami y México hasta el Cono Sur.Más tarde, fue responsable de Alfaparf Centroamérica, con base en Costa Rica.

Desde 2013, la planta de Alfaparf Milano en Garín ya produjo 7,7 millones de unidades anuales.
Desde 2013, la planta de Alfaparf Milano en Garín ya produjo 7,7 millones de unidades anuales.

"La Argentina tiene menos marcas que otros países, por el ciclo histórico de apertura y cierre de importaciones. A diferencia de otros mercados, se observa una mayor presencia de jugadores nacionales. Pero hay lugar para competir", analizó el escenario actual el CEO.

La multinacional tiene más de 40 años de trayectoria y es una de las referentes globales de la industria cosmética. Cuenta con filiales en 25 países y está presente en90. Sus cinco plantas de producción se ubican en Italia, la Argentina, Brasil, México y Venezuela. La fábrica local posee un laboratorio en el que se toman muestras para el control de calidad y la doble verificación de los productos ya chequeados en las demás instalaciones.

Su portafolio incluye a las marcas Milano, Il Salone, Yellow y Alta Moda. La dos primeras son de alta gama, usadas por profesionales en peluquerías. Se venden en salones de belleza. La tercera es la línea joven, también para profesionales, pero pensada para el consumo familiar. La cuarta se orienta al consumo masivo con la venta en cadenas de supermercados, farmacias y perfumerías del país, luego de acelerar su producción desde 2022.