

Quienes estén por viajar a México o tienen previsto salir del país, ya sea por motivos de ocio, negocios, trabajo o salud, deben considerar las regulaciones respecto a la cantidad de dinero que la Agencia Nacional de Aduanas de México (ANAM) permite cruzar la frontera sin necesidad de declarar.
Las restricciones aplican ya sea en dinero en efectivo, cheques mexicanos o foráneos, giros u órdenes de pago, documentos de crédito por cobra, o cualquier combinación de los elementos anteriores. Las infracciones incluye la retención del capital y hasta años de cárcel.
Cuál es el límite de dinero con el que se puede ingresar o salir de México
De acuerdo a la legislación vigente de la ANAM, introducir o extraer del país más de 10,000 dólares de Estados Unidos de América, o su equivalente en otras monedas, no es un delito; sin embargo, no declararlo sí lo es. Esto quiere decir que aquellos viajeros que deseen ingresar al país o salir al exterior y posean más de este monto deberán hacer un trámite obligatorio.
Cómo declarar el dinero en la Aduana de México
Toda persona que ingrese o salga de México y lleve consigo cantidades superiores al equivalente a 10,000 dólares tiene la obligación de declararlo a las autoridades aduaneras, a través de los siguientes formatos:
- Al ingresar al país, la "Declaración de Aduana para pasajeros procedentes del extranjero".
- Al salir, la Declaración de dinero, salida de pasajeros.
En caso de responder que se trae más de 10,000 dólares americanos en alguna de estas declaraciones, se debe llenar además la Declaración de Internación o Extracción de Cantidades en Efectivo o Documentos por Cobrar.

Cuál es la sanción para quienes no declaren la cantidad de dinero
En caso de no declarar, será acreedor a una multa del 20% al 40% sobre la cantidad que exceda a los 10 mil dólares. Si la cantidad que no se declara es mayor a 30 mil dólares americanos, será sancionado con una pena de 3 meses a 6 años de prisión y el excedente pasará a ser propiedad del Fisco Federal, salvo que se demuestre el origen lícito de los recursos.
En caso de no acreditarse su legítima procedencia, además puedes alcanzar una pena de 5 a 15 años de prisión y de mil a cinco mil días de multa, por considerarse una operación con recursos de procedencia ilegal.




