Finalmente, Estados Unidos levantaría pronto el cierre de su gobierno, el más largo de la historia con una extensión de 40 días por falta de acuerdo.

La decisión se acordó en el Senado, donde este domingo por la nacho se aprobó un voto de procedimiento para avanzar hacia un proyecto de ley que desbloquee fondos para reabrir el gobierno federal.

Ahora, el Senado consiguió los 60 votos necesarios para avanzar hacia un compromiso que permita pagar los salarios pendientes a los funcionarios y a las agencias federales.

Esto se logró después de que siete senadores demócratas y el independiente Angus King (que suele votar con los demócratas) decidieran romper con la disciplina de su partido para permitir extender el presupuesto hasta el 30 de enero.

Los demócratas que decidieron votar a favor de desbloquear el proceso en el pleno del Senado explicaron que estaba claro que los republicanos no iban a ceder y que “solo había un acuerdo en la mesa y esta era la mejor opción para reabrir el gobierno”.

Pese al acuerdo, este todavía debe pasar por otros votos en el Senado y finalmente por la Cámara Baja.

Una vez que esto ocurra, permitirá volver a pagar a los más de 650.000 funcionarios que llevan más de un mes sin recibir sus salarios y el pago retroactivo.

Además, se volverán a financiar a los departamentos de Agricultura (encargado de los cupones alimentarios para los más pobres), Asuntos de Veteranos y otras agencias hasta el 30 de enero.

Como parte de las negociaciones de hoy, el bando republicano aseguró a los demócratas que en diciembre votarían para extender los subsidios de la Ley de Cuidado Asequible, conocida como Obamacare, que finalizan este año y que se había convertido en el gran obstáculo para extender el presupuesto.

Senator Catherine Cortez Masto, a Democrat from Nevada, from left, Senator Maggie Hassan, a Democrat from New Hampshire, Senator Angus King, an Independent from Maine, and Senator Tim Kaine, a Democrat from Virginia, at a news conference during a vote at the US Capitol in Washington, DC, US, on Sunday, Nov. 9, 2025. The record-breaking US government shutdown is nearing an end after a group of moderate Senate Democrats agreed to support a deal to reopen the government and fund some departments and agencies for the next year, people familiar with the talks said. Photographer: Stefani Reynolds/Bloomberg
Senator Catherine Cortez Masto, a Democrat from Nevada, from left, Senator Maggie Hassan, a Democrat from New Hampshire, Senator Angus King, an Independent from Maine, and Senator Tim Kaine, a Democrat from Virginia, at a news conference during a vote at the US Capitol in Washington, DC, US, on Sunday, Nov. 9, 2025. The record-breaking US government shutdown is nearing an end after a group of moderate Senate Democrats agreed to support a deal to reopen the government and fund some departments and agencies for the next year, people familiar with the talks said. Photographer: Stefani Reynolds/BloombergFuente: BloombergStefani Reynolds

El líder de la minoría demócrata en el Senado de EE.UU, Chuck Schumer, se opuso esta noche al acuerdo y aseguró que mientras el gobierno federal estuvo cerrado el presidente estadounidense, Donald Trump, tomó a los estadounidenses afectados como “rehenes” al suspender el programa de asistencia de alimentos a familias, veteranos, a ancianos y niños".

“La crisis de cuidados de salud es tan grave y urgente para las familias que no puedo apoyar esta resolución de continuidad (del presupuesto)”, aseguró Schumer, cuya oposición también contó con la de la senadora progresista Elizabeth Warren, quien aseveró que al acuerdo era un “gran error”.

“Entiendo que algunos de mis compañeros demócratas no están contentos con este acuerdo, pero esperar una semana o un mes más no iba a significar un mejor resultado”, aseguró la senadora demócrata de Nuevo Hampshire Jeanne Shaheen, quien lideró las negociaciones con la bancada republicana para superar el impasse en el que se encontraban.

Los senadores demócratas que votaron a favor de superar el umbral de los 60 de los 100 votos, aseguraron que uno de sus principales objetivos es asegurarse que los créditos a las coberturas de Obamacare se mantienen para millones de estadounidenses que dependen de ellas.

El acuerdo debe obtener el aval de la Cámara de Representantes, donde hay división en ambos partidos. El líder de la minoría demócrata en la Cámara, Hakeem Jeffries, dijo que él votará que no, mientras que Pete Aguilar, presidente del Caucus demócrata, se sumó a la oposición al proyecto de ley porque “no arregla la crisis de cuidado de salud ni hace que la vida de los estadounidenses sea más asequible”.

Este cierre del gobierno federal se extendió por un récord de 40 días y provocó la suspensión del sueldo para varios cientos de miles de funcionarios federales, el cierre de servicios básicos, el impago de cupones de alimentos para los más pobres o largos retrasos en aeropuertos y el tráfico aéreo por la escasez de controladores o miembros de la seguridad aeroportuaria.

Ante la falta de salarios, muchos funcionarios se vieron obligados a recurrir a donaciones de comida o recurrir a préstamos de emergencia, todo esos mientras un gran número seguía trabajando sin recibir su salario.

Además, los analistas comenzaban a temer que el largo parón en la capacidad del gobierno federal para operar de manera plena iba a comenzar a tener un impacto irreversible en el crecimiento de la economía estadounidense.